Realizan severas críticas a la política agropecuaria proyectada por las autoridades

El gobierno ve el campo como carga, no como ocasión de desarrollo: productores

Prevén escalada de precios de entre 5 y 10% en productos lácteos, avícolas y pecuarios

MATILDE PEREZ U.

En los lineamientos generales de política agropecuaria para los próximos seis años asentados en el Plan Nacional de Desarrollo, el gobierno federal se limita a apuntar que promoverá la inversión, el uso racional del agua, la reconversión productiva e impulsará políticas públicas que tengan como meta aprovechar las capacidades y vocaciones de cada región, elementos con los que atenderá el grave rezago en dicho sector productivo.

En su planteamiento, el gobierno federal reconoce que 60 por ciento de la población rural se encuentra en condiciones de pobreza y marginación. "Los problemas en el sector agropecuario son particularmente graves. En 2006, el empleo en el campo representaba cerca de 14.2 por ciento de la población ocupada, pero sólo produjo cinco por ciento del producto interno bruto; es el sector con menor productividad y la pobreza endémica hace que sea necesario continuar con los apoyos para que mejore su productividad y promueva su sustentabilidad".

Agrega que en una década se perdieron para la agricultura 1.9 millones de hectáreas con potencial productivo y 68 por ciento de la superficie agrícola presenta algún grado de degradación. Además, los mantos acuíferos están sobrexplotados, independientemente de recibir descargas residuales.

Esta situación, agrega el documento -que tiene el sello de "confidencial" y fue entregado a los dirigentes de los partidos políticos y coordinadores de distintas fracciones parlamentarias-, "requiere de medidas estructurales importantes y de procesos que permitan focalizar los recursos que llegan al campo". Y entre esas medidas cita impulsar procedimientos para la sanidad e inocuidad, acceder a nuevos mercados, tecnología y crédito, impulsar la modernización y expansión de la infraestructura rural y promover la convergencia y optimización de programas y recursos, así como la planeación participativa.

Para las agrupaciones campesinas, el documento tiene serias deficiencias, ya que lejos de considerar el sector como prioridad nacional lo ve como una carga social y económica. Para el Congreso Agrario Permanente, la Confederación Nacional Campesina, la Central Campesina Cardenista y la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas -como lo asentaron en las propuestas de política agropecuaria que entregaron al secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas Jiménez-, el programa sexenal estará "cojo" si no se contemplan: soberanía y seguridad alimentaria; desarrollo agrario y superación de la pobreza rural; restauración, sustentabilidad y control de la nación sobre los recursos naturales; tecnología nacional apropiada e industrias nacionales de soporte, estado de derecho y armonización del marco legal e institucional.

Para el dirigente de la Central Campesina Cardenista, Max Correa Hernández, dichos factores son un "sexto eje" de acción para que los campesinos tengan la certeza de que seguir produciendo los alimentos de la población no es "factor de pobreza ni de continuidad del sacrificio histórico".

Advirtió que en las próximas semanas se iniciará una escalada de precios que serán de entre cinco y diez por ciento en los productos lácteos, avícolas y pecuarios, debido a la presión de los mercados internacionales y a la falta de maíz para satisfacer la demanda interna. Este es un asunto que no debe quedar a la deriva ni sujeto a pactos parciales, acotó.