Usted está aquí: miércoles 18 de julio de 2007 Cultura “Federación e INAH deben resolver lo del predio de Chichén Itzá”

El asunto no tiene la menor importancia: Patrón Laviada

“Federación e INAH deben resolver lo del predio de Chichén Itzá”

LUIS A. BOFFIL GOMEZ (CORRESPONSAL)

Mérida, Yuc., 17 de julio. El gobernador de Yucatán, Patricio Patrón Laviada, minimizó la controversia con la familia Barbachano, propietaria de los terrenos donde se asienta la zona arqueológica de Chichén Itzá.

Al respecto, el mandatario expresó: “No tiene la menor importancia.

“En todo caso, la solución corresponderá a la Federación y al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), pero yo, en lo particular, no le presto mucha importancia” –reiteró el mandatario, de extracción panista–, quien el primero de agosto entregará el cargo a la priísta Ivonne Ortega Pacheco.

Patrón Laviada manifestó que desde 2003, él se entrevistó con el empresario Fernando Barbachano Gómez-Rul, entonces dueño de 60 hectáreas correspondientes a Chichén Itzá, para tratar de dirimir el conflicto. Pero no hubo arreglo.

–No se pudo concretar (el acuerdo), pero siempre se mantuvo buena relación con la familia Barbachano.

No obstante, en información publicada por La Jornada se documentó que ese año Barbachano Gómez-Rul dialogó con Patrón Laviada y el primero propuso venderle simbólicamente sus terrenos “en un peso”, pues no quería entrar a un juicio de expropiación ni “regalar” la superficie de 60 hectáreas, donde se ubica el Castillo de Kukulcán, designado una de las siete nuevas maravillas del mundo moderno, y también el ancestral juego de pelota maya.

Juicio contra el gobierno de Yucatán

Como no hubo arreglo, entonces el empresario –fallecido en diciembre de 2006– instruyó a sus representantes legales a interponer un juicio mediante el cual reclamó el pago por concepto de entrada que recaudó el Patronato Cultur, dependiente del gobierno estatal, pero exclusivamente en la entrada trasera de la zona arqueológica, donde se ubica el hotel Mayaland, propiedad de la familia Barbachano. A la fecha, el pago que demandan los abogados asciende a 470 millones de pesos.

Pero a Patrón Laviada parece no importarle esta situación. “No me preocupa, no tiene la menor importancia; el INAH y la Federación son las instancias adecuadas para canalizar y resolver el problema”.

Acerca de que el instituto, en voz de su director general Alfonso de Maria y Campos, podría pagar 8 millones de pesos por la propiedad de la familia Barbachano, el mandatario remató: “Ya lo dije, no tiene la menor importancia”.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.