Usted está aquí: sábado 21 de julio de 2007 Cultura Africa profunda

DISQUERO

DISQUERO

Africa profunda

A principios de junio de 1981 aparecieron tras el proscenio del Teatro de la Ciudad personajes impresionantes, la cara pintada de guerreros, ataviados y armados como combatientes africanos por la paz y la cultura: los integrantes de uno de los grupos de jazz más notables, inteligentes, comprometidos socialmente, originales y propositivos hasta la fecha: el Art Ensemble of Chicago, agrupamiento de culto fundado a principios de la década prodigiosa de los 60, surgidos de las mejores tradiciones de vanguardia radical, artística e ideológicamente asentados en las mejores causas de la humanidad.

Estos músicos llegaron a México en esas fechas para participar de uno de los fulminantes festivales de jazz, en el que participó también otra leyenda, el pianista Archie Shepp, organizados por el maestro Raúl de la Rosa, uno de los mejores productores de concierto mexicanos que ha aportado mucho de lo mejor a la cultura nacional con sus producciones que no cesan hasta la fecha, pues en la actualidad De la Rosa prepara otro festival de blues en ese mismo foro, donde la década de los 80 inició con furor ante una pléyade de melómanos, escasa concurrencia que comprueba que quienes asisten a conciertos no se dejan llevar por la moda o los fenómenos mediáticos o ese ente tan difuso que se llama ''difusión", sino que las personas eligen a cuál concierto asistir: al que se merecen.

La buena nueva es que en los anaqueles de novedades discográficas apareció un dvd que recupera un concierto en vivo de estos muchachos estadunidenses apegados a su negritud. No está la escena inicial de sus conciertos, que vimos en México, cuando antes de empezar a hacer sonar su magia realizan una salutación a los cuatro puntos cardinales para enseguida soltar un hard bop de antología.

Suenan la trompeta, el sax, el contrabajo zumba, suenan artefactos percusivos de toda índole, vario linaje, lo mismo tambores zulúes que campanas occidentales y budistas, para realizar una ceremonia sonora espectacular, avasallante, abrumadoramente hermosa. Loor.

 
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