Usted está aquí: jueves 2 de agosto de 2007 Mundo Los pilotos intentaron "desesperadamente" detener el avión de TAM: investigadores

Divulgan dramático registro de las cajas negras del aparato accidentado en Brasil

Los pilotos intentaron "desesperadamente" detener el avión de TAM: investigadores

AFP, DPA, REUTERS

Sao Paulo, 1º de agosto. Los pilotos del Airbus 320 de la compañía TAM que se estrelló hace dos semanas en Sao Paulo intentaron "desesperadamente" detener el avión antes de estrellarse contra un edificio vecino del aeropuerto de Congonhas, según la transcripción de registros de las cajas negras, divulgado hoy por una comisión investigadora de la Cámara de Diputados de Brasil.

La transcripción demostró que la torre de control de Congonhas advirtió a los tripulantes que la pista estaba mojada y resbaladiza, mientras los pilotos informan del estado de algunos dispositivos de frenaje.

"¡Mira eso! ¡Desacelera, desacelera!", grita el copiloto. "¡No puedo, no puedo!", responde el piloto. "¡Oh Dios! ¡Oh Dios!", agrega. "¡Acelera! ¡Dobla, dobla, dobla!", es lo último que alcanza a decir el copiloto.

"¡Ah, no!", llega a decir el piloto antes que se escuchen gritos de la tripulación y de los pasajeros, junto a ruidos del choque.

En la comunicación, uno de ellos asegura que no funciona el reversor del motor derecho, que invierte el empuje de las turbinas para ayudar a frenar. Al aproximarse a la pista, toman el control manual del avión, luego se escucha el movimiento del acelerador, un aumento del ruido del motor y el toque en tierra.

Un piloto dice que sólo funciona un reversor y de "spoilers nada", en alusión a que el freno aerodinámico sobre el ala no entraba en funcionamiento.

De su lado, el periódico Folha de Sao Paulo, que accedió a datos de las cajas negras, indicó que una de las causas del accidente fue un error cometido por el piloto, quien al aterrizar puso la palanca de la turbina derecha del avión en posición de aceleración, cuando debería haber estado en punto muerto, como estaba la izquierda.

Otro posible error del piloto es el hecho de que sólo el reversor -que ayuda a frenar la aeronave- de la turbina izquierda estaba colocado en posición máxima, cuando los reversores de ambas turbinas deben estar en esa posición, aunque uno de ellos, como en este caso el derecho, estuviera inactivo.

El accidente del avión, el 17 de julio, causó al menos 199 muertos, entre pasajeros y personas que se encontraban en el local impactado. El resultado de la investigación se conocerá en 10 meses.

 
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