Lamenta que la dependencia vaya en contra del plan ecológico impulsado en la zona
Envía GDF inconformidad a Semarnat por ordenar cierre del Bordo Poniente
Asegura Arganis que no existe riesgo de que la ciudad se quede sin lugar de depósito
La administración capitalina envió una carta de inconformidad a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), por exigirles el cierre definitivo del Bordo Poniente, a fin de que cruce el circuito mexiquense sobre las estaciones de medición y hasta una nueva terminal aérea, lo cual va en contra del proyecto ecológico impulsado para mantenerlo como vaso regulador y generador de energía.
El secretario de Obras y Servicios, Jorge Arganis Díaz Leal, lamentó la negativa de las autoridades federales de autorizarles un incremento en su capacidad de cinco metros, pese a no correr ningún riesgo y estar sustentado en informes técnicos, y obligarlos a definir la ubicación del nuevo relleno dentro de la ciudad o hacer uso de los espacios que construirá el estado de México.
Su uso significará un costo adicional por el manejo y clasificación de las 12 mil toneladas de basura que se generan diariamente en la ciudad, por lo cual "trabajamos a marchas forzadas" para definir el mejor lugar y hacer de éste un proyecto integral, que permita la recuperación de energía y mejore el entorno, aunque no existe ningún riesgo de que nos quedemos sin un lugar de depósito, precisó.
En estos momentos se negocia con los municipios del estado de México para que dejen de enviar dos mil toneladas diarias de residuos sólidos, lo cual va por buen camino y ampliará por unos meses la vida del Bordo Poniente, cuyo cierre iniciará en diciembre pero llegar a los 12 metros de la plataforma dará un "respiro" hasta abril de 2008, y la formación de la cúspide llevará otros seis meses más, por lo cual tendremos casi un año más para iniciar la construcción del nuevo relleno.
La actitud de la Semarnat, sin embargo, de exigir al Gobierno del Distrito Federal el fin del relleno "no es congruente, porque significa el retiro de las estaciones de medición que tenemos para hacer un cierre adecuado", comentó el funcionario.
Reiteró que la negativa de la Comisión Nacional del Agua, a quien pertenece el terreno donde está ubicado el relleno desde hace 13 años, a aumentarlo de 12 a 17 metros de altura ha derivado en la búsqueda de un nuevo sitio entre 8 puntos "susceptibles" ubicados en el Distrito Federal y el estado de México, pese a encontrarse a 75 por ciento de su capacidad y que "nadie quiere un basurero cerca de su casa".
La compactación de los residuos y selección de productos susceptibles de reusarse o reutilizarse en una planta especializada, donde laboran los hijos y nietos de decenas de pepenadores, que antes lo hacían en los tiraderos a cielo abierto, han permitido que "no estemos al tope, pero las autoridades federales no toman en cuesta esto y han decidido que debemos cerrar y estamos en este proceso", precisó.
La decisión por ello de enviarle una carta de inconformidad pues lo que se requiere es que el lago de Texcoco siga con su vocación de tipo ecológico: cuente con pastizales y áreas verdes, y funja como una laguna de regulación y no como carretera o pista de aterrizaje, lo cual es muy delicado, pero hasta ahora no se ha tenido ningún tipo de respuesta de parte de Semarnat.