Usted está aquí: domingo 9 de septiembre de 2007 Economía Se compromete Calderón llevar a la ONU tema de emisión de gases

Planteará que países pobres y ricos asuman su responsabilidad ante el cambio climático

Se compromete Calderón llevar a la ONU tema de emisión de gases

Estados Unidos, China, Rusia y otros rehuyeron fijar objetivos para reducir contaminantes

Se debe tomar en cuenta tamaño de la población y PIB para obligar a bajar la infición, asevera

Claudia Herrera Beltrán (Enviada)

Ampliar la imagen Felipe Calderón, durante la conferencia con medios de comunicación, en el marco de su participación en la decimoquinta reunión de líderes del APEC Felipe Calderón, durante la conferencia con medios de comunicación, en el marco de su participación en la decimoquinta reunión de líderes del APEC Foto: Notimex

Sydney, 8 de septiembre. A tono con la declaración final de los líderes de la cuenca del Pacífico en pro de “frenar” las emisiones de los gases causantes del efecto invernadero, México impulsará en Naciones Unidas una propuesta para que los países desarrollados también se comprometan en esta materia.

El presidente Felipe Calderón, quien ha buscado adoptar el tema ambientalista como una de sus banderas, declaró que en la visita que hará a la ONU a finales de septiembre planteará que se establezca una “fórmula” para que los países pobres también se comprometan a reducir la emisión de contaminantes.

Al término de los trabajos de APEC, los 21 líderes de la cuenca del Pacífico concluyeron que el mundo necesita “frenar, cesar y luego revertir” las emisiones de los gases causantes del efecto invernadero, y adoptar objetivos modestos para frenar el calentamiento global.

Seguridad extrema

Pero el programada adoptado por los presidentes de Estados Unidos, China, Rusia y de otras economías de Asia-Pacífico en su reunión primera anual tiene limitaciones de origen, porque no fijó objetivos para reducir en cada país la emisión de gases contaminantes. Aunque establece un precedente porque se aplica a todos los integrantes del grupo, tanto desarrollados como en vías de desarrollo, y podría influir en las próximas negociaciones de la ONU sobre el cambio climático.

Calderón concluyó así su primera participación en el foro del APEC, que será más recordado por las pifias del presidente de Estados Unidos y las consabidas medidas de seguridad que convirtieron en un búnker el Palacio de la Opera de Sydney y los hoteles donde se hospedaron los líderes de la región.

El único gozo que tuvieron los habitantes de esta ciudad por el hecho de ser anfitriones de esta reunión fue un espectáculo de fuegos artificiales y un desfile de barcos de vela iluminados, que se realizó durante la cena ofrecida la noche anterior por el primer ministro australiano, John Howard.

Antes de asistir al último retiro de los jefes de Estado y de gobierno, el presidente mexicano explicó a la prensa que se debe ir más allá del Protocolo de Kyoto, que sólo obliga a los países desarrollados a tomar medidas, para que otras naciones no evadan su responsabilidad en el calentamiento global.

Por ahora, refirió que se han analizado diversas fórmulas para obligar a los países a reducir sus emisiones de gases causantes del efecto invernadero, como la de considerar el tamaño de su población, su producto interno bruto o niveles de crecimiento.

Los 21 miembros del APEC también acordaron hacer un nuevo esfuerzo para impulsar las moribundas negociaciones sobre la liberalización del comercio global en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

El presidente mexicano explicó que respalda la pronta conclusión de la Ronda de Doha; sin embargo, expresó su preocupación de que las economías que se han resistido a adoptar los compromisos “ya han tomado la actitud de detenerla totalmente o por lo menos evitar que llegue a su fin”.

En palabras de Calderón Hinojosa, las negociaciones para que los países desarrollados reduzcan los subsidios que otorgan a los agricultores están en una situación de “estancamiento”, una vez que su líder, el francés Pascal Lamy decidió suspenderlas hasta que no hubiera un cambio de actitud.

Como parte de sus actividades en Sydney también tuvo un encuentro con los presidentes de Chile, Michelle Bachelet; de Perú, Alan García, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, con quienes acordó impulsar la creación de un nuevo grupo denominado ARCO, que reúne a países de América que tienen costas en el Pacífico.

 
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