Usted está aquí: lunes 10 de septiembre de 2007 Política Grupo alemán pro derechos humanos, inquieto por recientes abusos en Chiapas

Repudia agresiones contra bases de apoyo zapatistas de la comunidad Ba’yulumax

Grupo alemán pro derechos humanos, inquieto por recientes abusos en Chiapas

Demanda a Calderón y a Sabines investigación profunda del ataque a Viejo Velasco

Hermann Bellinghausen (Enviado)

San Cristóbal de las Casas, Chis., 9 de septiembre. El Grupo de Trabajo Chiapas de la Coordinación Alemana para los Derechos Humanos en México manifiestó “gran preocupación por los acontecimientos recientes en México, sobre todo el incremento de las agresiones contra comunidades indígenas zapatistas o independientes, perpetrados por organizaciones con características paramilitares o aun en complicidad con agencias estatales”.

Asimismo, dicho grupo, compuesto por diversos organismos independientes de Alemania que durante años han observado los movimientos sociales en el país, expresó su repudio a las agresiones recientes contra Leonardo y Juan Navarro Jiménez, bases de apoyo zapatistas de la comunidad Ba’yulumax, municipio autónomo Olga Isabel, perpetrados por miembros de la Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (Opddic) el 10 de agosto pasado.

El ataque se suma a otras agresiones perpetradas por miembros de la Opddic en los municipios oficiales de Chilón y Ocosingo recientemente, “sin que las autoridades estatales y federales procedan para fincar responsabilidades y castigar a los culpables” señalan los defensores de derechos humanos. “Al contrario, parece que las actividades criminales de la Opddic fueran encubiertas por las instancias del Estado y formaran parte de la contrainsurgencia”, documentada por organismos civiles de Chiapas.

“Estos acontecimientos no pasan desapercibidos y son noticia en Alemania (igual que otras partes del mundo). En el caso del ataque a la comunidad Viejo Velasco el 13 de noviembre de 2006, se ha detenido a Diego Arcos Meneses, de la comunidad vecina de Nueva Tila, al que se acusa de cuatro homicidios y quien desde hace nueve meses está preso injustamente en la cárcel de Playas de Catazajá. Diego Arcos Meneses llegó al lugar de los hechos después del ataque para informarse y prestar su ayuda como promotor de salud. Cabe mencionar que después de la agresión había cuatro personas desaparecidas.”

Cabe recordar que este ataque se dio en el contexto de la estrategia oficial de “vaciar” de indígenas los Montes Azules. El grupo germano apunta que hace unas semanas el gobierno mexicano entregó un informe a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) donde reconoce que el operativo en Viejo Velasco, en el que participaron 300 elementos de la Policía Sectorial. “Esta aclaración coincide con los testimonios de testigos, que señalaron la participación de dichos elementos en el ataque y los homicidios.”

A solicitud de familiares de los desaparecidos, varias organizaciones no gubernamentales chiapanecas formaron una comisión civil de observación para buscarlos en las cercanías de Viejo Velasco, en Montes Azules. Así localizaron dos cadáveres, que podrían corresponder a los desaparecidos Mariano Pérez Guzmán y Miguel Moreno, parte de la comunidad destruida y masacrada por miembros de la comunidad lacandona, y por lo visto, policías estatales. “Hasta la fecha, queda pendiente la verificación por parte de los peritos.”

El grupo alemán recolectó más de 750 firmas para exigir la liberación de Diego Arcos Meneses. El documento fue entregado al encargado para asuntos de derechos humanos de la embajada mexicana en Berlín, Lino Santacruz, el 2 de agosto pasado.

En reacción a los descubrimientos recientes y la información obtenida a través de la CIDH sobre la participación de autoridades estatales en el ataque a Viejo Velasco, el grupo plural determinó dirigirse al presidente Felipe Calderón Hinojosa, al gobernador de Chiapas, Juan Sabines, y al fiscal general de la entidad, Mariano Herrán Salvatti, demandándoles “una investigación profunda e imparcial” de los hechos.

“Reivindicamos las exigencias al fiscal general de emprender una investigación imparcial y profunda de los hechos en Viejo Velasco; fincar las responsabilidades de los autores intelectuales y los agresores, así como su sometimiento a un proceso penal; de la aparición con vida de Mariano Pérez Guzmán y Antonio Peñate López, y liberar inmediatamente a Diego Arcos Meneses”.

Además se exige juicio a los agresores de Leonardo Navarro Jiménez y Juan Navarro Jiménez en Ba’yulumax. “Sentimos la obligación de contribuir con nuestros medios modestos a que se ponga fin a la represión contra las comunidades indígenas de Chiapas, en tiempos que nos recuerdan a la fase de alta actividad paramilitar en 1997 y 1998”, concluye el grupo de trabajo alemán.

 
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