Usted está aquí: lunes 10 de septiembre de 2007 Política SSP federal afirma que los efectivos de la PFP no son del Ejército ni la Marina

Desconoce convenios con Sedena y Semar por los que recibió personal militar

SSP federal afirma que los efectivos de la PFP no son del Ejército ni la Marina

El servicio de los elementos castrenses es de apoyo, señala uno de los acuerdos firmados

Gustavo Castillo García

Ampliar la imagen Policías federales preventivos vigilaron las instalaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro, en vísperas del primer Informe de Felipe Calderón Policías federales preventivos vigilaron las instalaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro, en vísperas del primer Informe de Felipe Calderón Foto: José Carlo González

Pese a que el número de militares que colaboran en la Policía Federal Preventiva (PFP) representa 60.4 por ciento del estado de fuerza de la corporación, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal afirmó que los elementos en activo de esta institución no son “del Ejército, así como tampoco de la Marina”, y declaró inexistentes los convenios con las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y Marina (Semar), mediante los cuales se han transferido desde 1999 efectivos a esa corporación.

Lo anterior se ofreció en respuesta a la solicitud de acceso a la información 0002200075807, tramitada por La Jornada ante la SSP federal mediante el Instituto Federal de Acceso a la Información pública (IFAI); por ello se promovió un recurso de inconformidad que se encuentra en trámite.

Pese a la negativa de la SSP, desde 1999 a la fecha se han signado 17 acuerdos entre las dependencias citadas, mediante los cuales la Sedena ha “prestado” personal, sobre todo de la tercera brigada de policía militar para la conformación y fortalecimiento de la PFP.

Según el convenio firmado en abril pasado por la Sedena y la SSP federal, el Ejército envió en apoyo de la PFP 7 mil 588 elementos, y la Semar comisionó en este año 278 marinos: en suma, 7 mil 866 miembros de las fuerzas armadas participan en esa corporación.

La cifra corresponde a 60.4 por ciento del estado de fuerza de la PFP, ya que la SSP federal informó que este año esa corporación tiene 13 mil 12 elementos en activo.

En 1999 se anunció la creación de esa policía y en un principio estuvo integrada exclusivamente por personal castrense. Según los datos del convenio signado en ese entonces por la Secretaría de Gobernación y la Sedena, la primera dependencia pagó 45 millones 46 mil 888 pesos “para mantener operativos ciento por ciento los citados recursos”, de los cuales no se precisa ni número de efectivos ni materiales “prestados” (armamento y transporte).

Estipulaciones del Ejército

Sin embargo, mediante la solicitud 00002200075807 se pudo conocer que en 2000 la PFP estaba integrada por 5 mil 535 elementos y, de acuerdo con datos de la Sedena, ese personal laboraba en la tercera brigada de policía militar.

Desde el inicio de la PFP la Sedena estipuló que, aun cuando participara en tareas policiales, ese personal no dejaría de pertenecer a las fuerzas armadas y de estar a disposición de las autoridades militares en caso de necesitarlo para otras tareas propias de la milicia.

A pesar de que desde el comienzo de la PFP se puso énfasis en la necesidad de reclutar personal para esa corporación, fue en la prórroga del convenio de 2000, cuando la SSP se comprometió por primera ocasión con la Sedena a “prever la construcción de sus instalaciones, reclutamiento de su personal, la adquisición de armamento y equipo necesario, a fin de cubrir con sus propios medios” las actividades que a esa fecha desempeñaba “el personal militar en apoyo de la PFP”.

Pero fue apenas en el acuerdo de abril pasado cuando el convenio comprometió a la SSP a “reclutar mil 500 elementos anualmente, con la finalidad de disminuir paulatinamente los elementos de la Sedena”.

La participación de militares en actividades policiacas tuvo un costo hasta diciembre de 2006 de 274 millones 822 mil pesos, a los cuales se suman 76 millones 540 mil 156 que deberá entregar la SSP para cumplir con el convenio de abril pasado, que tiene como fecha de vencimiento el próximo 31 de diciembre.

Respecto del estado de fuerza de la PFP a lo largo de su existencia, la SSP federal reportó que en 2000 estuvo integrada por 5 mil 535 hombres; en 2001, 9 mil 593 –ese año se incluyó al personal de la Policía Federal de Caminos (PFC) en la estructura de PFP, poco más de 4 mil 500 agentes–; en 2002 la corporación contaba con 10 mil 381 hombres; en 2003, 11 mil 142; en 2004, 10 mil 813; en 2005, 10 mil 639; en 2006 sumó 11 mil 989 hombres (se desplazaron por meses miles de efectivos a Oaxaca), y este año está integrada, según la SSP, por 13 mil 12 hombres.

De acuerdo con los datos obtenidos de los convenios entre SSP y Sedena, la PFP ha mantenido en sus filas por lo menos 3 mil 500 hombres de la tercera brigada de la policía militar. Sin embargo, en ocasiones el número de efectivos se ha incrementado, como en la actualidad, hasta llegar a 7 mil 588 elementos, con posibilidad de aumentar aún más si es necesario.

Las estadísticas de la SSP reflejan que a lo largo de los casi ocho años de existencia de la PFP, esta corporación no ha podido integrar a sus filas más que a 5 mil 424 civiles, sin tomar en consideración el número de agentes de la PFC que se sumaron obligatoriamente a esa corporación.

A pesar de la dependencia que la PFP tiene respecto del personal militar, la SSP federal aseguró en su respuesta a la solicitud 0002200075807 que “los elementos en activo de esta institución no son elementos del Ejército, así como tampoco de la Marina, lo anterior en razón de que al incorporarse y bajo el supuesto normativo consagrado en el artículo 111 del reglamento de la Ley de la PFP, dejan de serlo desde el momento en que presentan su renuncia ante la institución o dependencia en la cual prestaban sus servicios, cambiando su calidad a la de miembro de la PFP; esto es, al incorporarse un ex elemento del Ejército o de la Marina a éste órgano administrativo desconcentrado, por ese acto deja de serlo, siendo que éste es voluntario, libre y espontáneo”.

Sin embargo, los convenios firmados para la colaboración de militares en actividades de la PFP señalan expresamente que “los recursos humanos de la Sedena que prestarán sus servicios en apoyo de la SSP operarán de manera orgánica y bajo el mando de sus propios comandantes, sin mezclárseles con otro tipo de personal”, y se precisa que éstos “seguirán sujetos a las normas de disciplina militar que los rigen y al marco jurídico aplicable”.

La única excepción para que un militar deje de serlo y pase a formar parte de la PFP se refiere a quienes meses atrás aceptaron voluntariamente el ofrecimiento de la SSP para convertirse en policías federales.

En tanto, la Semar informó en mayo pasado que había trasladado 278 marinos “en calidad de comisión” a la PFP, y que otros 255 lo habían hecho de manera permanente, causando baja en esa institución castrense.

 
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