Usted está aquí: jueves 13 de septiembre de 2007 Gastronomía Anticipan productores un boom en el consumo de carne de avestruz

Sabrosa y sana su demanda se cuadruplicará en cinco años, pronostican

Anticipan productores un boom en el consumo de carne de avestruz

En México, el kilo cuesta 160 pesos; “es barata porque no tiene grasa ni colesterol”

Arturo Cruz Bárcenas

Ampliar la imagen "El avestruz es una ave muy nerviosa, la peor cosa que puede afectar su producción es el estrés". En la imagen la granja Maasai Ostrich, cerca de Kajiado, a 50 kilómetros de la ciudad de Nairobi “El avestruz es una ave muy nerviosa, la peor cosa que puede afectar su producción es el estrés”. En la imagen la granja Maasai Ostrich, cerca de Kajiado, a 50 kilómetros de la ciudad de Nairobi Foto: Reuters

Un avestruz puede llegar a medir 2.60 metros de altura, pesa hasta 160 kilos, corre a una velocidad de 70 kilómetros por hora durante casi 30 minutos, puede sobrevivir una semana sin tomar agua, vive un promedio de 80 años en cautiverio, pone hasta mil huevos en su vida, desova mientras no llueva y en cada temporada pone cerca de 90 huevos; del total de polluelos que nacen sobrevive –después de todo el proceso de incubación– entre 35 y 40 por ciento, “y su carne es muy rica, sabrosa y sana”, afirmó Sergio Guzmán, productor de avestruces en el estado de México.

En entrevista, explicó que el avestruz es originaria de Namibia, en Sudáfrica, de donde fue llevada a Estados Unidos, hace 25 años, donde la crianza no prosperó por los monopolios de la res, y empezó “emigrar” a México (en 1990), primero en Monterrey, Nuevo León; Sonora, Durango, Guadalajara y estado de México.

Actualmente, en esta entidad se producen al mes 1.2 toneladas de carne de avestruz que es parte del total nacional de 4 toneladas. “El potencial de este animal es enorme: primero la carne, de la cual se elaboran subproductos, como los embutidos (chistorra, roast beaf, salchicha) y los precocidos (mixiote y barbacoa). Otro producto es la piel, que se utiliza para confeccionar zapatos, portafolios, chamarras, etcétera.

“También, marroquinería (accesorios como carteras y llaveros) o joyería, o bisutería (decoraciones, botones y alhajas), que así como se hacen con el mármol, en este caso se hacen con el pico y la pezuña.”

Guzmán es el principal y único productor de avestruz en el estado de México. “El mercado actual del país demanda 10 toneladas de su carne; de hecho, la demanda es cuatro veces más de lo que podemos producir, tan sólo con los clientes fijos, la perspectiva de crecimiento de aquí a cinco años es de aproximadamente 50 toneladas mensuales”.

–El mexicano tiene la tendencia a preguntar a qué sabe esto o aquello, lo nuevo. Una barrera que debe cruzar.

—Es una cultura, pero afortunadamente la gente prueba el avestruz primero por curiosidad, por recomendación, pues quien ya probó la carne sabe que es rica, y por necesidad, puesto que tiene menor cantidad de calorías, colesterol y ácido úrico, por lo que que es recomendada por los nutriólogos y médicos a las personas que padecen diabetes o problemas gástricos.

“Como la gente ahora busca productos orgánicos o naturistas, de fácil digestión, sin grasa, con omega 3, etcétera, la carne de avestruz cumple con todos esos requerimientos. No nos ha costado introducirla al mercado porque es mucha la demanda de productos cárnicos y mucho más la de productos sanos.

Ni alas ni pechuga

“La carne de avestruz es muy suave. Toda es de pierna porque no tiene pechuga. En un animal de 120 kilogramos en pie tenemos 60 de canal y 30 de carne, pero de éstos 15 son suaves y 15 son duros. Los suaves se mandan a filete, que nosotros vendemos como bistec, y los duros los enviamos a embutidos. La carne que sale al mercado es suave.

“El kilo cuesta de 150 a 160 pesos. Este precio es competitivo desde dos puntos de vista: esta carne ha bajado de precio, puesto que hace diez años se vendía en 300 pesos. Nosotros siempre la hemos ofrecido en 150, y nos hemos mantenido, a diferencia de la de res, que ha venido subiendo, desde 60 hasta 120 pesos que cuesta ahora.

“Un corte de res, que puede ser costilla, arrachera, o cualquier otro, tiene 35 por ciento de grasa, 20 por ciento de cartílago y tendón, y a veces, un 10 por ciento de hueso. Estamos hablando que de un corte que cuesta 120 pesos, únicamente tenemos 40 o 50 por ciento de carne magra, lo que representa un kilo de 240 pesos. La de avestruz, carne magra, la estamos cobrando en 160. Es más barata. Sólo necesitamos darle a entender a la gente por qué es más barata.

“Además es comprar salud a futuro, porque implica cuidar la salud desde ya, sin entrar en problemas de ácido úrico, por ejemplo. Consumir avestruz un día a la semana es saludable. Esta carne se puede adquirir en el outlet de Tlanepantla; en Toluca hay muchos puntos de venta, como La Vaquita Negra, Súper Compras y algunas carnicerías. Nosotros atendemos a los restaurantes de la zona metropolitana.

“Los chinos gustan mucho de la carne de avestruz, pero sobre todo las vísceras, porque saben que éstas contienen la mayor cantidad de proteínas. En algunos negocios la están combinando con algunos moles y aderezos. Hay lugares en la Condesa, Del Valle, Polanco y Roma donde se puede conseguir lo no tradicional. Sigue siendo exótica, no por más cara, sino por la búsqueda de lo diferente.

“El avestruz come semillas, como maíz, sorgo, avena, trigo, etcétera. Tienen fama de comer de todo, pero cuando se les mete en un corral se acaban el pasto y les damos alfalfa o zacate picado. Pocas veces usamos alimento comercial, que es de purina y de malta, pero que es más caro”.

El avestruz es un animal muy nervioso. “La peor cosa que puede afectar la producción del avestruz es el estrés. Cuidamos que no tengan sobresaltos y desde que nace hasta que muere no se toca para nada. ¡Dios me libre de que llegue la gripe aviar! Es una enfermedad que se puede controlar, pero… sería incosteable”. Más información en www.ranchosanandres.com.

 
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