Usted está aquí: lunes 15 de octubre de 2007 Deportes Camoteros y la Máquina entretienen y emocionan, aunque dividen puntos

El equipo de La Franja mantiene su buen paso; llegó a 15 unidades en el torneo

Camoteros y la Máquina entretienen y emocionan, aunque dividen puntos

El arquero Óscar Pérez y el ariete César Delgado fueron las figuras de los cementeros

Notimex

Ampliar la imagen Álvaro Bola González disputa un tiro de esquina con el defensa azul Roberto Carlos Juárez Álvaro Bola González disputa un tiro de esquina con el defensa azul Roberto Carlos Juárez Foto: Notimex

Puebla, 14 de octubre. Puebla mantuvo su buen desempeño futbolístico frente a un Cruz Azul que tuvo en el arquero Oscar Pérez y el argentino César Delgado a sus figuras, en encuentro con emociones en ambas metas que culminó 1-1.

En partido de la fecha 12 del torneo Apertura 2007 disputado en el estadio Cuauhtémoc, el uruguayo Álvaro Bola González hizo el gol de Camoteros al 62, mientras Édgar Gerardo Lugo había puesto adelante a La Máquina, a los 23.

El equipo comandado por José Luis Sánchez Solá, que terminó con diez hombres por la expulsión de su capitán Joaquín Velázquez al minuto 90, llegó a 15 puntos para continuar en el cuarto peldaño del Grupo Uno.

En tanto, los dirigidos por el uruguayo Sergio Markarián recuperaron el subliderato del escuadrón Tres, al sumar 18 unidades, para superar por diferencia de goles a San Luis.

El guardameta Conejo Pérez y el argentino Chelito Delgado fueron las figuras del conjunto visitante, ya que el primero tuvo oportunas intervenciones para evitar que el cuadro poblano hilvanara su cuarto triunfo, y el atacante argentino provocó con su movilidad varias faltas que llenaron de tarjetas al equipo de casa, inclusive la expulsión para el capitán Velázquez.

Las ausencias de los titulares pesaron de arranque para el cuadro azul, pues la falta de comunicación entre los defensas centrales Joaquín Beltrán y Roberto Carlos Juárez estuvieron a punto de costar caro, porque se dieron algunas llegadas sin marca de los uruguayos González y Mateo Figoli.

Puebla quiso aprovechar la poca actividad de los zagueros rivales y desbordarlos con velocidad, algo que funcionó los primeros instantes, pues faltó coordinación en las coberturas, pero no lo reflejó en el marcador.

Cruz Azul se puso al frente en su primer arribo serio al área rival, en acción en la que Delgado escapó por la derecha en carrera que inició en posición adelantada, llegó al área y metió servicio raso que Lugo sólo tuvo que firmar al 23, anotación que dio pie a un cambio en el control del juego.

Comenzó a pesar sobremanera el Chelito, cuya movilidad en llegadas por ambas bandas desquició al conjunto poblano. La Maquina pudo ampliar su ventaja porque fabricó muchas oportunidades, las cuales llegaron a motivar algunos “olés” en las gradas, sólo que perdonaron a su rival.

Tras el ajuste en el vestidor al medio tiempo, los anfitriones retomaron el control del partido y encerraron a los Cementeros en su campo.

El ingreso de Sergio Rosas dio profundidad a los avances de La Franja, en tanto los celestes tuvieron un par de tiros desviados.

A los 52, Puebla dio el primer aviso de peligro con un remate de Adrián Sánchez que Pérez desvió para que el balón diera en el poste derecho y fuera alejado por el debutante Roberto Juárez, uno de los encargados de suplir a los seleccionados Julio César Domínguez y los paraguayos Carlos Bonet y Denis Caniza.

El agobio local terminó por vencer la resistencia cementera al 62, cuando José Ruiz remató al travesaño, el rebote fue a dar al argentino Juan Quiroga, cuyo zurdazo raso fue manoteado por Conejo Pérez y el balón cayó a González, quien sólo empujó para el 1-1.

Cruz Azul volvió a generar algunas aproximaciones, en tanto que el conjunto de casa no dejó de atacar, aunque en los minutos finales se replegó.

Al 73, hubo una acción que pudo inclinar el partido al bando celeste, ya que González cargó por la espalda en el área a Miguel Sabah, en clara pena máxima que Armando Archundia no sancionó.

En la última jugada del partido el Chelito se enfilaba a un mano a mano con el arquero Martínez, pero fue detenido por Velázquez, quien vio la roja pero salvó a su equipo.

 
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