Usted está aquí: lunes 22 de octubre de 2007 Política Cumple el SAR una década con un balance negativo para los trabajadores

Investigadora de la UNAM refiere que las Afore ganan casi el triple que el ahorrador

Cumple el SAR una década con un balance negativo para los trabajadores

El sistema está pensado para beneficio del sector financiero, indica Berenice Ramírez

Susana González G.

En los 10 años que ha cumplido el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), el único beneficiado ha sido el sector financiero, pues en dicho periodo las administradoras de fondos para el retiro (Afore) han obtenido 101 mil millones de pesos por rentabilidad, mientras que los trabajadores prácticamente han tenido que pagar hasta 23 centavos por cada peso que han aportado para su pensión, advirtió Berenice Ramírez, especialista del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Precisó que en términos porcentuales las Afore y las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos para el Retiro (Siefore) han alcanzado una rentabilidad histórica de 7 por ciento en la pasada década, en contraste con 2.7 por ciento que han obtenido los trabajadores.

“Esa es una gran diferencia entre en las ventajas de rentabilidad que están obteniendo quienes administran los recursos de los trabajadores y los destinan a sociedades de inversión, frente a lo que en realidad obtienen los mismos trabajadores, quienes son los que aportan ese dinero”. Así que, puntualizó, el sistema ha resultado un éxito, pero para las administradoras y el sector financiero.

“Inversionistas de largo plazo”

La investigadora cuestionó la aseveración que hace una semana emitió el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Agustín Carstens, de que el cambio del sistema de pensiones emprendido en 1997 ha implicado que millones de mexicanos sean inversionistas de largo plazo en varios mercados y cuenten con diversidad de opciones de inversión en competencia para elegir libremente.

Explicó, si difícilmente los trabajadores pueden estar informados sobre cuáles administradoras les convienen más en cuanto a rentabilidad y comisiones bajas, mucho menos tienen posibilidades de saber a qué proyectos de inversión se destinan sus ahorros y aun si éstos llegan a ser rentables, las ganancias sólo serán para las administradores y no para ellos en sus pensiones.

El sistema, dijo la investigadora, está pensado para beneficio del sector financiero, pero nada tiene que ver con la seguridad social, ya que debido a las altas comisiones que se cobraban hasta principios de 2006, se calculaba que para que un trabajador recuperara totalmente el valor de cada peso que invertía deberían transcurrir cinco años.

Además, Berenice Ramírez mencionó que el sistema tampoco ha mostrado efectividad en el manejo de los recursos, puesto que 65 por ciento se ha invertido en bonos gubernamentales, y de ellos la mitad se ha destinado a gasto corriente o administrativo, en lugar de proyectos productivos, lo que evidencia “un manejo inadecuado y un desperdicio” de los ahorros de los trabajadores.

Coautora del libro Efectos económicos de los sistemas de pensiones, editado por El Colegio de la Frontera Norte, la especialista destacó que otros problemas que enfrenta el sistema es tanto la baja cobertura, ya que sólo hay 13 millones de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social, como la alta concentración de cuentas en cinco administradoras, pese a que existen 21.

Dijo que difícilmente los trabajadores mexicanos podrán obtener pensiones dignas en México cuando no se cuenta con salarios dignos, lo que explica por qué no están en posibilidades de incrementar voluntariamente las aportaciones a su fondo de retiro.

Sin embargo, las autoridades insisten en un modelo que no ha probado su efectividad y en lugar de someterlo a revisión y analizar otras opciones, están empeñadas en desmantelar los sistemas solidarios porque hacen análisis “muy alejados de la situación real” y partir de lo que funcionarios o empleados de alto nivel pueden aportar por su cuenta, sin considerar que México presenta una heterogeneidad laboral, salarial y social muy elevada.

(El 13 de septiembre pasado, Berenice Ramírez participó en el programa Momento económico –de Radio UNAM– con el tema “Las reformas a los sistemas de pensiones en México: causas y consecuencias”.)

 
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