Usted está aquí: martes 30 de octubre de 2007 Cultura Un tenor mexicano, tercer lugar

Terminó la vigésima versión del certamen Nuevas Voces

Un tenor mexicano, tercer lugar

Eva Usi (Especial)

Berlín, 29 de octubre. Nuevas y prodigiosas voces tiene el mundo de la ópera. Con una disputada audición de gala concluyó la vigésima versión del concurso internacional Neue Stimmen 2007 (Nuevas Voces), patrocinado por la Fundación Bertelsmann, cuya fase final tuvo lugar en la ciudad de Gutersloh, en la parte occidental de Alemania.

Al respecto, la soprano letona Marina Rebeka recibió el primer premio, dotado de 15 mil euros; el bajo argentino Fernando Javier Radó obtuvo el segundo (10 mil euros), y el tenor mexicano Diego Torre conquistó el tercero (8 mil euros).

Marina Rebeka, de 27 años, cosechó una cerrada ovación del público por su interpretación de un aria en el papel de Violeta, en la Traviata de Verdi. También se ganó el consenso de un jurado internacional presidido por el tenor mexicano Francisco Araiza, actualmente profesor en la Escuela Superior de Música de Stuttgart.

“Es una cantante joven con una gran fuerza interpretativa, que cuenta ya con una experiencia escénica importante, con una hermosa voz y poseedora de una técnica depurada,” dijo Araiza sobre la soprano letona, quien no pudo contener las lágrimas al enterarse de la decisión del jurado.

Fernando Javier Radó, de 21 años, cantó magistralmente el aria de Felipe II en Don Carlos, de Verdi. No cabía de júbilo, no se creía haber llegado hasta el segundo puesto sabedor de que a su edad, máxime siendo bajo, la voz no ha llegado todavía a su madurez.

El mexicano Diego Torre, ganador del tercer puesto, se impuso entre la elite internacional del bel canto con una soberana presencia escénica y una voz “capaz de cantar las más difíciles arias de Verdi, algo muy raro”, dijo el crítico e integrante del jurado, Jürgen Kesting. Diego Torre, de 27 años, interpretó un aria de la ópera Un Ballo in Maschera, de Verdi. “Disfruto mucho cantando, sobre todo el repertorio de Verdi y de Puccini, y me siento feliz de haber llegado hasta aquí, porque es una plataforma que abre nuevos horizontes”, dijo.

Mil 100 cantantes de 66 países concursaron. En la ronda final quedaron 46 jóvenes talentos que viajaron a Gutersloh, donde fueron seleccionados 16 para la semifinal y ocho para la final.

 
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