Usted está aquí: jueves 20 de diciembre de 2007 Economía Caída en ventas causa el peor año para la industria automotriz en dos décadas

Anticipa la AMDA que en 2008 seguirá la contracción en la actividad

Caída en ventas causa el peor año para la industria automotriz en dos décadas

La importación de autos usados, una de las causas de la pérdida de mercado

Víctor Cardoso

El año 2007 quedó grabado como “el peor” del último cuarto de siglo para la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), debido a que cerrará con una “triste y lamentable” reducción de 2.3 por ciento en la venta de vehículos.

Para los distribuidores de una de las actividades fundamentales del sector industrial del país, 2008 no se visualiza con mejores resultados porque, desde su punto de vista, el mercado del crédito -uno de los impulsores del crecimiento en el sector hasta 2006- está “saturado”.

Según Guillermo Rosales Zárate, director general adjunto de relaciones gubernamentales de la AMDA, el mercado interno de venta de vehículos automotores a crédito, uno de los principales motores de desarrollo en los últimos años, se encuentra saturado y sin expectativas de crecimiento para el año entrante.

Una posible reactivación en las ventas de unidades automotrices el próximo año de 1.5 por ciento en el mercado nacional, lo que supondría una colocación de sólo 25 mil unidades adicionales. Esto, “no será suficiente para revertir la caída de 2007”, dijo. Pero a manera de ejemplo citó que con base en esas expectativas, “en términos absolutos, en 2008 se estarían vendiendo menos vehículos que en 2006”, apuntó.

Un reporte de la agrupación estima que el pronóstico para 2008 considera que las ventas no serán suficientes “para revertir la caída con que cerraría 2007”, e incluso algunos distribuidores calculan que las ventas del año entrante no rebasarían las del presente. Esto, “como resultado de los vaivenes (económicos) en el mercado estadunidense, la importación de unidades usadas, la falta de una política de renovación del parque vehicular y la carga de impuestos a (la compra de) unidades nuevas”, señalan.

De acuerdo con los datos de la AMDA, para el año entrante, el crecimiento de las ventas de vehículos automotores en México será “limitado” por una “saturación” del mercado del crédito”, por el estancamiento del mercado interno y una falta de control y reglas específicas frente a la apertura de las importaciones de vehículos usados.

Rosales Zárate refirió incluso que otro elemento que influirá en menores ventas de vehículos será el nuevo régimen fiscal para la adquisición de vehículos nuevos. En este sentido dijo que la compra de unidades nuevas debe verse como una parte de la renovación del parque vehicular y un consumo que impulsa la recaudación fiscal.

Interrogado sobre la apertura a las importaciones de vehículos usados a partir del 1 de enero, Rosales Zárate dijo que se deben establecer los mecanismos necesarios para hacer cumplir las reglas de protección al consumidor en cuanto a calidad y garantía de abasto en partes y refacciones, tal y como se exige a los distribuidores nacionales.

El problema para la industria automotriz nacional, dijo Rosales Zárate, es que una caída en el mercado interno repercute en 25 ramas industriales de proveeduría de partes y componentes que inciden en el ingreso y el empleo de las familias mexicanas relacionadas con esa rama productiva.

 
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