Usted está aquí: martes 8 de enero de 2008 Política Cambiará México su estrategia para frenar abusos contra migrantes en EU

Impulsará programa de cero tolerancia, para que atropellos “les cuesten en tribunales”

Cambiará México su estrategia para frenar abusos contra migrantes en EU

Entre las medidas, aumentar número de consulados y elevar presupuestos: diplomáticos

Se relanzará candidatura del país como miembro no permanente del consejo de la ONU

Karina Avilés

Frente al hecho de que la reforma migratoria “fracasó” y el principal responsable es el “Congreso norteamericano”, el gobierno de México impulsará una “nueva estrategia” de “cero tolerancia” a las violaciones a los derechos de los connacionales en Estados Unidos, la cual consistirá en aumentar el número de consulados –hasta llegar a 50– y el presupuesto, así como en adoptar acciones “contundentes” para que les “cueste en tribunales” abusar de los indocumentados, adelantaron diplomáticos de México en el país vecino.

Convencidos de que los intentos por que se modifique el marco jurídico en Estados Unidos en la materia han naufragado y con la idea de que puede venir otra ola de leyes “no muy bonitas”, aceptaron que el que México continúe presentando argumentos “contundentes no garantiza de ninguna manera que las voluntades se quiebren, doblen o convenzan, porque hay sectores en el Congreso estadunidense y en la sociedad que mantienen una posición férrea contra la reforma en ese rubro”.

Sin embargo, eludieron el tema de la eventual responsabilidad de México en dicho fracaso. El cónsul de nuestro país en Nueva York, Rubén Beltrán, manifestó que adjudicarse “responsabilidades o faltas me parecería difícil de asir. No sabría cómo construir un laboratorio y decir 85 por ciento está acá y 15 por ciento allá. Evidentemente, el gobierno mexicano está comprometido en seguir abogando por una reforma migratoria integral, la cual enfrenta una resistencia muy grande”.

En el contexto de la 19 Reunión de embajadores y cónsules de México, en la que participan más de 200 miembros del servicio exterior, la canciller Patricia Espinosa señaló, en el acto inaugural, que hay un clima adverso para los migrantes, agravado por el debate electoral en esa nación, y prometió que se mejorarán los programas de protección y servicios, aunque recordó que ser eficaz en el apoyo a los connacionales implica serlo tanto adentro como fuera del territorio.

La amplia agenda del encuentro, que continuará hoy, se abordó a puerta cerrada, por lo que más tarde, ante la presión de los representantes de los medios de información, los cónsules en Nueva York y Phoenix ofrecieron una conferencia de prensa, en la cual trataron el tema migratorio, uno de los principales en la reunión.

En la sede de la cancillería, adelantaron algunas de las nuevas estrategias que se implantarán como parte del plan especial de protección a migrantes, llamado por Rubén Beltrán programa de “cero tolerancia” a los abusos contra los connacionales.

Informó que otras acciones serán impulsar alianzas estratégicas con sindicatos, organizaciones civiles e iglesias, para construir una agenda pro hispana, pro migrante y pro derechos humanos, así como crear redes consulares para trabajar a escala regional. Además, expandir los programas Jurimex y Empleo hacia otros condados. El primero, continuó, es una línea gratuita de 24 horas, en la que el solicitante recibe asistencia jurídica. En el segundo, realizado en colaboración con el Departamento del Trabajo de la nación vecina, se establecen denuncias laborales.

Luego de señalar que la “geografía de la intolerancia” tiene distintos niveles y acentos en Estados Unidos, añadió que se impulsará la conformación de una red de abogados, que fortalezca la acción de los consulados. Entre las estrategias centrales destacó el incremento de los recursos financieros y humanos, por lo que se abrirán nuevos consulados en Boise, Idaho; Anchorage, Alaska, y se reabrirá el de Nueva Orléans.

De igual forma, abundó, se lanzará una campaña de difusión sobre las aportaciones de los migrantes a la economía estadunidense, pero también sobre los derechos que éstos tienen, por ejemplo, en materia laboral, pues 80 por ciento desconocen que pueden pertenecer a un sindicato pese a su estatus de indocumentados. Así, dijo, se convencerá por la “vía contundente del tribunal que no es buen negocio andar abusando de los derechos de los migrantes”.

En relación con las expectativas por el endurecimiento de las medidas contra los indocumentados, como la entrada en vigor en Arizona de una ley que castiga a los patrones que les den empleo, el cónsul de México en Phoenix, Carlos Flores, confió en que los beneficios monetarios de la fuerza laboral de los connacionales reorientarán esa política. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Arizona, declaró, se perderían 6 mil millones de dólares en el primer año fiscal si fuera erradicada la mano de obra de esos trabajadores.

Antes, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, reiteró la decisión de impulsar la candidatura de México como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas, (ONU) y convocó al Servicio Exterior Mexicano a sentar las bases de una plataforma para una nueva política en la materia.

Más tarde, los diplomáticos comieron con el presidente Felipe Calderón. Luego se desarrollaron los trabajos sobre seguridad y cooperación internacional contra el crimen organizado.

¿Por qué pedir ayuda a Estados Unidos?

Por la noche trascendió que el subsecretario de América del Norte, Carlos Rico, presentó el argumento de por qué pedir ayuda a Estados Unidos en materia de seguridad. Esto en referencia a la cuestionada Iniciativa Mérida.

Miembros del servicio diplomático que asistieron a la reunión señalaron que el funcionario dijo que México no puede detener solo el tráfico de armas, y por otra parte también requiere ayuda para evitar el ingreso de seudoefedrina que llega por Long Beach. Esa sustancia, aseguraron, viene de China, India y Alemania, y debido a que está prohibido su ingreso a territorio nacional se necesitan apoyos para monitorear los puertos por donde llega.

Por otra parte, el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, indicó, de acuerdo con los asistentes, que no se puede decir que se ha ganado la batalla en materia de seguridad. Habría sido cuestionado por los participantes sobre cómo documentar “el éxito” en esa problemática. El titular de la dependencia presentó el proyecto de reforma judicial, y el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, el programa en la materia. De ambos, aseguraron miembros del cuerpo diplomático, no se dijo nada nuevo.

 
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