Usted está aquí: viernes 11 de enero de 2008 Ciencias Descubren cómo producir células madres de embriones sin dañarlos

La nueva técnica podría atraer nuevas inversiones al proceso de investigación

Descubren cómo producir células madres de embriones sin dañarlos

El método es “moralmente plausible, pero todavía no brinda una solución ética”, advierten opositores

En meses “podríamos hacer tantas como queramos”, asegura investigador

El proceso para convertir células de piel aún está en una fase de prueba y desarrollo

Afp

Chicago, 10 de enero. En un avance que podría poner fin al debate ético sobre el uso de embriones humanos en la investigación médica, científicos desarrollaron una manera de crear células madres embrionarias humanas sin dañar el embrión.

Lo hicieron extrayendo una sola célula del embrión –según el procedimiento utilizado en las clínicas de fertilización in vitro para efectuar pruebas de detección de defectos genéticos– e introduciendo una molécula común, denominada laminina, para preservar la pluripotencia que caracteriza a las células madres embrionarias.

El desarrollo del embrión no fue afectado por la biopsia, según el estudio publicado el jueves por Cell Stem Cell.

La nueva técnica promete así acelerar las posibles aplicaciones clínicas de terapias con células madres para una amplia gama de enfermedades.

Las células madres tienen la capacidad de convertirse en cualquier tejido del organismo y ofrecen por eso la esperanza de cura para numerosas enfermedades actualmente incurables, así como la posibilidad de reparar órganos destruidos por un cáncer o un accidente.

Sin embargo, la investigación con estas células es muy controvertida porque con las técnicas actuales los embriones viables son destruidos en el proceso de extracción de las células madres.

Carrera contrarreloj

Dos grupos de científicos superaron recientemente este problema al lograr convertir células de piel humanas en células madres.

Las células de la piel se convertirán probablemente en la fuente más común de células madres, indicó el investigador australiano Alan Trounson, que encabeza el mayor proyecto mundial de investigación con células madres en el Instituto de Medicina Regenerativa de California.

Pero las células de la piel todavía no están prontas para un uso clínico porque el proceso de transformación introduce alteraciones genéticas y virus potencialmente mortíferos.

Esto significa que las células madres embrionarias, que no cargan con el mismo riesgo de mutación, son actualmente la única opción para aplicaciones terapéuticas, indicó Trounson.

“También habrá mucha gente interesada en las células madres embrionarias porque son la calidad de oro”, dijo a la Afp, explicando que las derivadas de la piel todavía no han sido investigadas por completo.

Robert Lanza, pionero en células madres, confía en que la nueva técnica que ayudó a desarrollar para preservar el embrión, impulsará a las autoridades estadunidenses a liberar fondos para nuevas líneas de investigación.

El presidente estadunidense George W. Bush prohibió en 2001 –en nombre de la protección de la vida desde la concepción– la utilización de fondos federales para realizar investigaciones con nuevas series de células madres embrionarias humanas.

En otros países se prohibió la investigación por preocupaciones éticas.

“En los próximos meses podríamos hacer tantas células de éstas como queramos”, dijo Lanza, científico de Advanced Cell Technology.

Lanza también advirtió sobre confiar en las células madres derivadas de la piel.

“Son utilizables. No están genéticamente modificadas. Están aquí”, destacó.

Enfoque moral

Sin embargo, uno de los principales opositores a la investigación con células madres estimó que el método de Lanza –aunque “moralmente plausible”– “todavía no brinda una solución ética”.

“Cualquier procedimiento que ponga en riesgo la salud y la vida de un embrión humano para propósitos que no lo benefician directamente es moralmente inaceptable”, dijo el reverendo Tadeusz Pacholczyk, director de educación del Centro Nacional Católico de Bioética.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.