Usted está aquí: viernes 15 de febrero de 2008 Mundo Congresistas, en favor de procesar a asesores de Bush

Congresistas, en favor de procesar a asesores de Bush

Afp, Reuters y Dpa

Washington, 14 de febrero. La Cámara de Representantes se declaró hoy en favor de la apertura de procesos judiciales y civiles contra dos cercanos colaboradores del presidente George W. Bush, que se niegan a declarar sobre el despido de varios fiscales federales en 2006, cuyas causas nunca fueron aclaradas por el mandatario.

El secretario general de la Casa Blanca, Joshua Bolten, y la ex directora de asuntos jurídicos de la Presidencia, Harriet Miers, fueron citados a comparecer ante comisiones legislativas para explicar las razones de los despidos, pese a que Bush se ha opuesto constantemente a que sus colaboradores sean llamados a rendir cuentas sobre el caso.

En 2007 el despido de los fiscales se convirtió en un conflicto político y jurídico entre el Congreso y el Poder Ejecutivo, puesto que el retiro de los funcionarios ocurrió en medio de alegatos sobre supuestas presiones de la Casa Blanca y el secretario de Justicia, Alberto Gonzales contra los funcionarios.

En este pleito legal entre la Cámara baja y la presidencia, Bush ha invocado el “privilegio del Ejecutivo” para impedir que su testimonio y el de sus colaboradores sea requerido en esta investigación, que el año pasado llevó a Gonzales a presentar su renuncia.

El remplazo de Gonzales, sin embargo, no ha resultado en la apertura de los procesos de investigación sobre el despido de los fiscales.

El actual secretario de Justicia y fiscal general, Michael Mukasey, se declaró contra el llamado a cuentas a los funcionarios de la Casa Blanca, cuando acudió en octubre pasado a las audiencias del Congreso para ser confirmado en su puesto, nominado por Bush.

Luego que la Cámara baja se declaró en favor de la apertura de los procesos, el asunto quedó en manos de la fiscalía federal del Distrito de Columbia (Washington).

Durante la sesión de este jueves algunos representantes republicanos optaron por abandonar el salón de plenos para protestar por la decisión de los demócratas –quienes son mayoría– de votar sobre los procesos en contra de Bolten y Miers.

La oposición argumentó que en estos días es más importante discutir la propuesta de Ley de Vigilancia de Extranjeros, que forma parte del paquete de medidas legales de Bush para articular su guerra contra el terror.

Los demócratas asestaron a Bush otro golpe el miércoles, al aprobar un proyecto de ley que prohíbe a los servicios secretos el recurso de la tortura en los interrogatorios a sospechosos de “terrorismo”.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.