Usted está aquí: lunes 10 de marzo de 2008 Capital Asalto frustrado a laboratorios de Polanco; buscaban seudoefedrina

■ La sustancia estaba almacenada en 10 tambos en un cuarto bajo llave en Lago Rodolfo

Asalto frustrado a laboratorios de Polanco; buscaban seudoefedrina

■ Se impidió el robo gracias a que los hampones estacionaron mal la camioneta en que viajaban

Mirna Servín Vega

Un asalto contra unos laboratorios de Polanco que guardaban seudoefedrina provocó una balacera, que dejó a uno de los ladrones heridos, cuando trataron de huir al ser sorprendidos por la policía capitalina la mañana de ayer.

Los hechos ocurrieron cuando tres delincuentes sorprendieron a María del Carmen Figueroa Ávila, de 30 años de edad, cuando iba a relevar a su hermana Carolina, de 27, en las labores de custodia de la empresa Randall Laboratories SA de CV, ubicados en el número 58 de la calle Lago Rodolfo, colonia Ampliación Granada, en la delegación Miguel Hidalgo.

Tras someter a las mujeres, los hampones buscaron la seudoefedrina, la cual se almacenaba en 10 tambos en un cuarto bajo llave, lo que impidió que pudieran sacar el material.

Cabe resaltar que en noviembre del año pasado el Consejo de Salubridad General estableció las reglas para destruir la seudoefedrina que fue retirada de circulación en el país. Las autoridades de salud emitieron un acuerdo para prevenir el uso y consumo de seudoefedrina y efedrina, que incluye la prohibición de producir, importar y comercializar estos medicamentos en el país.

Durante el asalto, muy cerca del laboratorio, en la misma calle de Lago Rodolfo pero en su cruce con Marina Nacional, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) ubicaron una camioneta Dodge Durango color gris oxford modelo 2002, placas 708-LYJ, que se encontraba mal estacionada.

Los policías capitalinos se acercaron al conductor y le solicitaron sus documentos; el tripulante entregó su licencia de conducir y el tarjetón. En ese momento otro sujeto se acercaba al vehículo, pero al ver a los uniformados se dio la vuelta.

Uno de los uniformados pidió al sujeto que hiciera alto; en respuesta, el presunto delincuente se volteó y disparó; la bala impactó el lado derecho de la patrulla.

Al repeler la agresión, los uniformados hirieron al delincuente frente al número 220 de la calle Emerson, donde arrojó dos armas de fuego: una Glock negra, calibre 9 milímetros, con 13 cartuchos útiles, y un revólver 38 Especial Rossy, matrícula JO755, con dos cartuchos percutidos y cinco más en el interior.

El herido fue identificado como Jorge Villegas Villadas, de 40 años de edad, quien fue llevado al hospital Polanco en calidad de detenido.

En tanto, el conductor de la Durango aprovechó la confusión generada en la balacera para escapar, no sin antes golpear a la patrulla y a un taxi Tsuru, placas A-07-763.

Sin embargo, el uniformado se quedó con su licencia, a nombre de Julio César Ramírez Cepeda, y el tarjetón de circulación de la misma, a nombre de Ana María Soberanes Bonilla, presunta propietaria de la misma.

Las mujeres lograron liberarse y señalaron que al escuchar las detonaciones los hampones huyeron.

 
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