Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER  
Domingo 16 de marzo de 2008 Num: 680

Portada

Presentación

Bazar de asombros
HUGO GUTIÉRREZ VEGA

La música en el aire
JOAQUÍN BORGES TRIANA

De la dramaturgia al teatro
ESTHER SUÁREZ DURÁN

La danza y los bailarines
ISMAEL ALBELO

Una mirada al cine
ENRIQUE COLINA

La diversidad poética
ALEX FLEITES

El desánimo narrativo
ARTURO ARANGO

Arte cubano: mercado, mutación y diversidad
RAFAEL ACOSTA DE ARRIBA

Leer

Columnas:
Mujeres Insumisas
ANGÉLICA ABELLEYRA

Paso a Retirarme
ANA GARCÍA BERGUA

Bemol Sostenido
ALONSO ARREOLA

Cinexcusas
LUIS TOVAR

La Jornada Virtual
NAIEF YEHYA

A Lápiz
ENRIQUE LÓPEZ AGUILAR

Artes Visuales
GERMAINE GÓMEZ HARO

Cabezalcubo
JORGE MOCH


Directorio
Núm. anteriores
[email protected]

 

La música en el aire

Joaquín Borges Triana*


Zeus y Teufel, grupo de metal-rock cubano

En este quinquenio se ha recuperado la música sinfónica. Se ha propiciado la formación de orquestas de provincia con muy buen nivel, como la de Matanzas. Hubo una revitalización de la música de cámara y ha nacido un movimiento de música antigua que abarca distintos grupos con distintos formatos, impulsado por la agrupación Ars Longa. Ha mantenido una impronta muy interesante la música coral, que ha tenido un intercambio muy rico a nivel mundial. En la lírica, el principal problema es la carencia casi absoluta de posibilidades de grabación. Se sigue graduando gente con formación, con buenas voces, pero que no encuentran un espacio para desarrollarse, aunque salen a giras y varias compañías tratan de mantener vivo ese movimiento.

Acorde con los períodos de fluctuación que tiene cualquier producto, Buenavista Social Club empezó a perder protagonismo, entre otras causas por la muerte de varias de sus figuras frontales. Al mismo tiempo se manifestó un interés hacia otras formas de ver la música cubana, como ocurrió con la repercusión internacional de la película Habana Blues, que reflejó una escena underground, vinculada a lo que se ha dado en llamar músicas alternativas (rock, hip hop, rap, pop, canción, música electrónica, tecno, house y demás variantes).

Se ha ido conformando una escena alternativa o indie, como le llaman internacionalmente, no sólo con la presencia creciente de grupos –lo que ha ocurrido desde hace muchos años–, sino con la creciente aparición de productores de discos independientes que se comercializan en los conciertos, fanzines, que también se venden de mano en mano; webcines, que se alojan en el extranjero, y hasta en la aparición de un portal (www.cuba-metal.com) y una tienda electrónica.


Orishas, grupo de Hip Hop

En cuanto a la música popular bailable, después de un auge en los años noventa, se ha producido cierto estancamiento en la timba, que es una especie de salsa heavy, con mucho metal y polirritmia, que no ha logrado prender internacionalmente, salvo en algunos lugares con alta presencia de cubanos, como Italia o Cancún. Aquí ha retrocedido, en parte por la desaparición de muchos lugares de baile, como el Palacio de la Salsa.

El pop es el género que ha sido el protagonista por excelencia de estos cinco años en Cuba. En algunos casos hereda presupuestos de la Nueva Trova, por su discurso textual (Buena Fé), hay otro un tanto más latino (David Blanco), otro más vinculado al rock (Moneda Dura) o de corte flamenco (Aceituna sin Hueso). Hay agrupaciones que venían de la timba que han tratado de insertarse con un discurso popero, como la Charanga Habanera y Paulito FG.


Tendencia, grupo de metal-rock

Como hacía muchos años que no ocurría, hay un movimiento de jazzistas cubanos impresionante, no sólo en el latino o afrocubano, sino en otras manifestaciones, como el eléctrico o el más experimental.

En el país también ha estado presente el fenómeno mundial de la crisis de la industria discográfica. Aquí el disco es básicamente un producto para los turistas o para venderlo fuera. El cubano promedio no compra, porque un disco es casi tu salario de un mes.

*Periodista, crítico, editor del boletín electrónico de música alternativa Los que soñamos por la oreja.