■ Depredan el recurso y en tres años podrían agotarlo, advierten pescadores y especialistas
Empresas asiáticas saquean jaiba en las costas de Sonora y Sinaloa
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Empresarios pesqueros de origen asiático, asociados con mexicanos, depredan jaibas en las costas del sur de Sonora y del norte de Sinaloa, donde capturan ejemplares en crecimiento y en reproducción, lo que pone en riesgo la fuente de ingresos de unas 80 mil personas
Foto: Javier Valdéz
Culiacán, Sin., 3 de abril. Empresarios de origen asiático capturan jaiba ilegalmente en zonas de crecimiento y reproducción del crustáceo, en las costas norte de Sinaloa y sur de Sonora, lo que pone en riesgo la fuente de ingresos de unas 80 mil personas, denunciaron el biólogo Hansen Fuentes Rosario, el productor Gerardo Valenzuela Rodríguez y una de las organizaciones perjudicadas.
La recolección de jaiba enhuevada, llamada así cuando está en proceso de reproducción, se ha desplomado entre 50 y 70 por ciento, según las denuncias interpuestas ante la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca) y la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Este año algunas embarcaciones locales han tenido que conformarse con capturas de 40 o 50 kilogramos, cuando en 2001 pescaban entre 100 y 250 kilogramos por panga, señalan Fuentes Rosario, Valenzuela Rodríguez y la Unión de Productores de Jaiba de Sonora en acusaciones, fechadas el 30 y 31 de julio y el 9 de agosto de 2007.
Agregan que las empresas que violan las normas oficiales NOM 009 y NOM 033 son Cosechar, Pesquera Sammy, Congeladora Romano y Pesquera México, cuyos socios son, respectivamente, los coreanos Tae Ho Kim, Samy Cho y Kim Jeong Tae Hwa, quienes están coludidos con empresarios nacionales, sobre todo de Sonora.
Las empresas de Tae Ho Kim capturaron 600 toneladas de jaiba en el ciclo 2003-2004; 800 en 2004-2005 y mil 100 toneladas en 2005-2006. Éste se envía al mercado internacional.
En contraste, dejaron de operar las empresas Export Crab, Ocean Gold, Tres Annas, ABC y PescaMex, en cuyas fábricas y zonas pesqueras laboraban más de 5 mil personas. En cinco años esta industria generó más de 500 millones de dólares.
El investigador advirtió que de continuar este saqueo en dos o tres años la actividad podría desaparecer porque se abusa del recurso y no hay criterios de sustentabilidad ni de respeto a la reproducción de la especie.
“Pedimos hacer cumplir la ley para detener la captura de jaiba enhuevada y juvenil por parte de los pescadores de Sonora y Sinaloa”, señala el documento enviado a autoridades de Sagarpa, Conapesca y de la Comisión Nacional de Vigilancia Pesquera.
Rafael Lazo Díaz, subdelegado de Pesca de la Sagarpa en Sinaloa, informó que se investiga la denuncia y se han reforzado la inspección y la vigilancia en las costas de Sinaloa, sobre todo entre pescadores y plantas que usan la jaiba como materia prima.
El funcionario envió al delegado estatal, Guadalupe Carrizoza, un documento en el que detalla las operaciones de esta dependencia en respuesta a la denuncia presentada por especialistas y pescadores. Precisó que participan la Secretaría de Marina, la Policía Estatal Preventiva e inspectores de la Conapesca.
Recordó que la norma oficial mexicana NOM-039-PESC-2003 regula la pesca de jaiba en el litoral del Pacífico y estipula que deben devolverse, “en las mejores condiciones de sobrevivencia posibles, los ejemplares con talla mínima, así como jaibas hembras en estado de madurez reproductiva (hembras ovígeras o con hueva)”.
En un oficio enviado el 3 de agosto a esta subdelegación y firmado por Prisciliano Meléndrez Barrios, director general de inspección y vigilancia de la Conapesca, se confirma que la denuncia fue interpuesta y ordena que sea atendida.
El oficio fue dirigido con copia a Ramón Corral Ávila, comisionado nacional de pesca, y al delegado Guadalupe Carrizoza, sin que hasta ahora se conozcan los resultados.
La captura de especies reproductoras, larvas o postlarvas se sanciona con multas hasta de 2 mil salarios mínimos, decomiso del producto y artes de pesca y vehículos, y clausura temporal de las instalaciones.