Usted está aquí: lunes 12 de mayo de 2008 Capital Agotado, el modelo actual de seguridad: Joel Ortega

■ Desertores del Ejército pasan, en su gran mayoría, al hampa, dice

Agotado, el modelo actual de seguridad: Joel Ortega

■ Exhorta a repensarlo y definir alternativas eficaces

■ Estamos pagando errores y costos de la inacción, afirma ombudsman

■ Irá SSP a El Salado

Raúl Llanos y Mirna Servín

El secretario de Seguridad Pública de esta ciudad, Joel Ortega Cuevas, aseguró que ha sido “espectacular” el número de efectivos del Ejército Mexicano que ha desertado en los ocho años anteriores para, en su gran mayoría, engrosar las filas del crimen organizado, por lo que convocó a las autoridades castrenses a que conjuntamente analicen con seriedad esa situación, pues no pueden seguir “nutriendo” a la delincuencia y al anrcotráfico.

Ortega Cuevas participó ayer en la campaña promovida por la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea Legislativa, para intercambiar juguetes bélicos por juegos didácticos, y ante funcionarios federales, locales y el titular de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Emilio Álvarez Icaza, aseveró que uno de los aspectos más preocupantes en esas deserciones, son las de militares que formaron parte de las Fuerzas Especiales del ejército, que a la fecha suman 2 mil 400, y que buena parte de ellos, desafortunadamente, están yendo a formar parte del crimen organizado.

Durante su amplia intervención, el titular de la SSP-DF se refirió a los constantes homicidios de mandos policiacos federales y locales a manos de grupos delictivos relacionados, sobre todo, con los cárteles de las drogas, y consideró que eso revela el agotamiento del modelo de seguridad pública aplicado en el país, el cual se debe repensar y definir alternativas eficaces.

“Sigo creyendo –dijo Joel Ortega– que necesitamos ver cómo disminuimos los nutrientes que tiene el crimen organizado”, y ubicó en los ex militares una de las fuentes. “Hay una gran cantidad de efectivos de las Fuerzas Armadas que se han pasado al lado de los criminales; tenemos que pensar eso de manera muy seria, ¿qué vamos a hacer para evitar que elementos destacados del Ejército se pasen del lado del crimen. Tenemos que hablarlo con toda transparencia y el Ejército nos tiene que ayudar a discutir el tema”.

A la par, consideró que otra fuente de “nutrientes” del narcotráfico son los policías municipales, por lo que se debe discutir si ya llegó la hora de hacer reformas para suprimir a estos cuerpos y fortalecer las policías estatales y federales, en lugar de estar alimentando a ese “monstruo” que se tiene enfrente y que se llama delincuencia organizada.

En su oportunidad, el ombudsman capitalino, Emilio Álvarez Icaza, consideró que “hoy estamos pagando los errores y costos de la inacción” frente al problema del narcotráfico y el crimen organizado.

Reforzó lo vertido por Ortega y dijo que “en los últimos cinco años el número de efectivos del Ejército que han desertado es casi el equivalente al tamaño del Ejército, con todo lo que esto implica”.

Mientras, la diputada Carmen Segura, presidenta de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea Legislativa, pidió unidad frente a la delincuencia, no titubear y dar una respuesta contundente, y si bien dijo que el crimen organizado aún no rebasa la capacidad del Estado, se tienen ya focos de alerta que nos obligan a multiplicar los esquemas de coordinación.

En otro tema, Joel Ortega precisó que el miércoles de esta semana, junto con personal de la delegación Iztapalapa ingresarán de nueva cuenta al tianguis El Salado, no sólo para comenzar el ordenamiento de los comerciantes y acabar con la venta de drogas y armas, sino también para ejecutar órdenes de aprehensión contra los responsables de la destrucción de una patrulla, en ese lugar, la semana pasada.

Detalló que se identificó ya a 35 personas responsables de las agresiones a la policía durante el decomiso de 35 toneladas de productos ilegales en este tianguis, 12 de los cuales tienen antecedentes penales por venta de droga, posesión de armas y lesiones.

 
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