Usted está aquí: domingo 27 de julio de 2008 Política González Garza: un albazo de PAN y PRI acabará con la poca estabilidad que queda

■ La aprobación de las iniciativas del gobierno o del tricolor dividirá al país, advierte

González Garza: un albazo de PAN y PRI acabará con la poca estabilidad que queda

■ Existe angustia en Felipe Calderón; quiere que pase una reforma, ¿cuál?: la que sea

Roberto Garduño

Javier González Garza, coordinador de la bancada del PRD en San Lázaro, advirtió que un albazo legislativo del PAN y del PRI implicaría la división del país: “Ojalá no se metan por ahí porque lo poco, muy poco, de estabilidad que todavía tenemos se va a perder, porque la aprobación de esas iniciativas –del gobierno y del PRI— divide al país, no al Congreso, y ojalá que lo piensen, porque sí estamos en disposición de enfrentarlo pase lo que pase”.

Dijo que el PRD no permitirá que las conclusiones de los debates en el Senado y en la UNAM se descarten, porque “estaríamos faltándonos al respeto nosotros mismos y a los ponentes”

—¿Se prevé que PAN y PRI tomen el derrotero de aprobar una reforma consensuada entre sí?

—Este es un tema que por fortuna se abrió; en la historia del Congreso nunca se había discutido un tema con tal amplitud. La gente está enterada, me extraña que el PRI haga una propuesta antes de entregar una valoración de los debates y de la consulta cuando se comprometió a esperar los resultados.

—¿Dónde están las diferencias entre la defensa del petróleo y las iniciativas del gobierno y del PRI?

—Es inaceptable pretender seguir desmembrando a Pemex; cuando en el mundo las industrias petroleras tratan de consolidarse, aquí vamos al revés. En Pemex no se respetan los derechos laborales, el sindicato tiene un cogobierno corrupto con las administraciones. No debemos exportar crudo, hay que aspirar a la industrialización para que en cinco o siete años este país exporte derivados del crudo.

—El gobierno ha emprendido una feroz campaña mediática para impulsar cambios a Pemex, ¿qué se encuentra en el fondo?

—Hay cierta angustia de Felipe Calderón; él requiere de una reforma, ¿cuál? La que sea, porque no puede pasar el asunto como el que hizo la propuesta y no se aprobó, le ha metido voluntad, el dinero para que esto salga, es como el aeropuerto de Fox, y ahora quisiera algo, lo que sea.

—El PAN y el gobierno panista han minimizado los debates en el Senado –se le insistió.

—Es necesario entender qué nos dio el debate, plantear qué es lo que sí queremos y empezar la discusión; no vamos a aceptar ninguna propuesta que tenga que ver con privatizaciones y que beneficie a unos cuantos en perjuicio de la mayoría, sí estamos de acuerdo en modernizar Pemex, en tener petroquímica básica y secundaria de primer nivel. No vamos a cerrar los ojos a lo que se planteó en el debate. Cada fuerza envió a los mejores exponentes y no podemos descalificar a la gente que hizo exposiciones brillantes. Eso no se puede ir a la basura porque faltaríamos al respeto a los ponentes y a nosotros mismos.

—Ante los proyectos del desmembramiento y de edificar una gran industria nacional, ¿avizoran el mayoriteo de PAN y PRI?

—Sí va haber un problema de choque porque el PAN y el gobierno han dicho que la gente no está preparada y no entiende un problema tan complicado como el petróleo. Es muy acotado suponer que la gente no tiene capacidad para entender cierto tipo de cosas, sobre todo cuando hemos pasado por tantas privatizaciones; lo vimos con Telmex, con la banca privatizada, en ferrocarriles, en las minas y ¡cuidado con eso! Que la gente no pueda decidir, perdonen, tenemos una historia reciente desde la época de la Revolución Mexicana. Se nos ha dicho que si se aprueba la reforma habrá salud, educación, eso es una falacia.

—¿Prevé un problema de inestabilidad nacional si se presenta una decisión no consensuada?

—Tenemos comisiones que preparan los escenarios para enfrentar un albazo; no sólo no vamos a participar en la dictaminación, sino que vamos a hacer movilizaciones. Ojalá no se metan por ahí, porque lo poco, muy poco, de estabilidad que todavía tenemos se va a perder, porque la aprobación de esas iniciativas –del gobierno y del PRI— dividen al país, no al Congreso, y entonces ojalá que lo piensen porque estamos en disposición de enfrentarlo pase lo que pase. Aguas, no sólo estuvo el debate que mucha gente vio, ya un gran sector del país está informado de lo que el gobierno y el PRI pretenden hacer.

 
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