■ Evitará que México se quede en la “pura maquila”, afirman

Ganadores del Premio Nacional de Tecnología demandan mayor inversión

■ Calderón convoca a todos los sectores a superar “este enorme rezago”

Claudia Herrera Beltrán

Los ganadores del Premio Nacional de Tecnología demandaron ayer al presidente Felipe Calderón mayor inversión para evitar que México se quede en la “pura maquila”, y propusieron crear un fondo aeronáutico, así como favorecer las compras gubernamentales a compañías nacionales.

El presidente Felipe Calderón respondió que sociedad y gobierno requieren emprender un gran esfuerzo para superar este “enorme rezago” y convertir a la calidad y la tecnología en valores fundamentales de una nueva cultura productiva.

Acompañado del nuevo secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, el Ejecutivo aprovechó la conmemoración del natalacio de Emiliano Zapata para convocar a todos los órdenes de gobierno, a la academia, a las instituciones educativas, tecnológicas y de investigación, a las universidades y a los medios de comunicación, a unir esfuerzos para lograr el crecimiento económico y, en ello, dijo, la tecnología es un factor clave.

Durante la ceremonia, el empresario mexicano de origen español Emilio Otero Marbán habló a nombre de los galardonados y más de una vez provocó que el mandatario federal se sonrojara y sonriera. La primera fue cuando le dijo que este premio les costó “un chingo” (palabra que se eliminó de la versión estenográfica de Los Pinos) de trabajo a las empresas.

El director de Industria de Turborreactores también provocó risas entre los integrantes del presídium y en el público cuando felicitó a Calderón por el esfuerzo que hace en apoyar la investigación, aunque luego comentó: “después de todo, además de ingeniero, (tengo) algo de político y barbero”.

Enseguida, el también presidente de la Asociación de las Empresas Aeronáuticas pidió que el gobierno impulse la tecnología, sobre todo en el sector aeronáutico, porque muchas empresas del ramo se están asentando en México como “maquila de alto nivel”, lo que se puede aprovechar para crear tecnología propia.

Le sugirió crear un fondo aeronáutico que podría llamarse “Proaero” –en referencia al Proárbol–, aplicar otras medidas que no cuestan dinero, como el diseño de un plan aeronáutico nacional y crear una oficina de transferencia de tecnología que dependa de la Presidencia de la República e impulse la adquisición de tecnología por parte de dependencias como la Secretaría de Marina y Petróleos Mexicanos.

También planteó que el gobierno debe favorecer a las compañías nacionales en compras del gobierno, “aunque políticamente no es muy correcto”, y crear una banca de desarrollo que cobre tasas de interés preferenciales a quienes generen proyectos tecnológicos.

Las empresas premiadas fueron Chrysler de México, el Centro de Investigación y Desarrollo Carso, Nucitec, el Centro de Investigaciones en Polímeros, Servicios Especializados y Tecnología Informática y el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey.