Usted está aquí: sábado 30 de agosto de 2008 Cultura La pintura de Lezama no abandona a quien la contempla: Monsiváis

■ Presentan el catálogo de la exposición La madre pródiga

La pintura de Lezama no abandona a quien la contempla: Monsiváis

Fabiola Palapa Quijas

Para el escritor Carlos Monsiváis, Daniel Lezama “es un pintor absolutamente contemporáneo, que incorpora a su obra varias tradiciones al mismo tiempo, y les da la oportunidad de movilizarse, extinguirse o renacer en cada cuadro.”

Durante la presentación del libro-catálogo de la exposición Daniel Lezama y la madre pródiga, que se realizó este jueves, Monsiváis señaló que la pintura del artista además de tener varias cualidades, tiene el don de no abandonar a quienes la contemplan; “cualquier opción que elija el lector-espectador, de cualquier manera seguirá por su cuenta el relato; si lo abandona, su conciencia pictórica nunca lo dejará en paz”.

En su intervención en la librería Gandhi, el escritor Mauricio Achar explicó que la obra de Lezama siempre se escapa porque ningún cuadro valioso y significativo puede contemplarse igual. “El lector-espectador cambia de imágenes y al hacerlo modifica su criterio y su entusiasmo, por eso ve de otra manera.”

Abundó que al mirar con detenimiento una pintura nunca se ve del mismo modo y varían los modelos de apreciación, y quedarse en la contemplación de un cuadro o de una obra, la costumbre respeta, aquilata o traiciona las apreciaciones anteriores.

“Cada cuadro de Lezama –indicó Monsiváis– propone momentos que le toca desarrollar a sus observadores o a los cazadores de imágenes. A él o ella, se le estimula desde la pintura a proseguir por su cuenta su narración.

“Ya estás aquí, contemplas el óleo. El lector-espectador realista y posmoderno o el partidario de la oscuridad, si rechazas la pintura anecdótica no importa, estás frente a un cuadro que es una propuesta, una decisión artística, y lo más importante, tiene todas las posibilidades de fijarse en la memoria.”

De acuerdo con Monsiváis, la pintura de Lezama brinda la posibilidad de soñar o relatar su propia historia, luego de que el artista inició la fabulación. Caravaggio –añadió el escritor– forma parte del árbol genealógico de Lezama. El heterodoxo que crea una ortodoxia durable en ciertos momentos.

Precisó que el ser un pintor no exime a Lezama “de cantar pasiones, de imaginar vínculos extraños o comunes y corrientes. De proponer a quienes lo ven a que si quieren tomen una sola pintura e indaguen el por qué está ahí.”

El libro, editado por la galería Hilario Galguera, reúne 104 imágenes del artista, quien es conocido por abordar temas fuertes y en ocasiones de enorme crudeza.

Erik del Castillo, curador de la muestra Daniel Lezama y la madre pródiga que se exhibió en el Museo de la Ciudad de México, señaló que el libro-catálogo “es una pequeña suerte de plataforma de un amplio proyecto que logró trascender de la exposición al papel.

En la presentación del libro también participaron Luis Carlos Emerich e Hilario Galguera.

 
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