Usted está aquí: martes 9 de septiembre de 2008 Capital Sorpresiva destitución de Isidro Cisneros como presidente del IEDF

■ La remoción se dio en ausencia de éste, pues la sesión había concluido

Sorpresiva destitución de Isidro Cisneros como presidente del IEDF

■ Provisionalmente nombran en su lugar a Gustavo Anzaldo Hernández

Rocío González y Raúl Llanos

A propuesta del PAN y por mayoría de votos, el pleno del consejo del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) destituyó de su cargo en la presidencia a Isidro Cisneros Ramírez, y en su lugar colocó de manera provisional a Gustavo Anzaldo Hernández, en tanto se nombra a quien dirigirá el organismo durante los próximos dos años.

En una accidentada sesión convocada para aprobar la convocatoria de inicio del proceso electoral de 2009, cuatro de los seis consejeros modificaron el texto original para incluir el relevo en la presidencia, con el argumento de que así se establece en el artículo 125 del Estatuto de Gobierno del Distrito Federal recientemente modificado.

La remoción de Cisneros Ramírez, así como la del secretario ejecutivo Oliverio Juárez, se realizó en ausencia de ambos, pues ya habían dado por concluida la sesión tras someter a votación sólo la citada convocatoria y sin el cambio propuesto por el representante del albiazul, Juan Dueñas, y retomado por el consejero Ángel Díaz Ortiz, quien prácticamente dirigió el relevo.

Ante el asombro y la confusión en el auditorio, en el que se encontraba un notario público, sin que se supiera por quién fue contratado, Díaz Ortiz se levantó para pedir que el secretario administrativo, Francisco Bravo, continuara la sesión, pero ante la negativa del servidor público, quien prefirió presentar su renuncia, propuso de inmediato que fuera sustituido por el director ejecutivo del Servicio Profesional Electoral, Guillermo Merelo.

De nada sirvieron los argumentos vertidos previamente por los representantes de PRD, PT, PVEM y Convergencia, ni tampoco de los representantes de los grupos parlamentarios en la Asamblea Legislativa: del PRI Jorge Schiaffino, y de Nueva Alianza, Xiuh Tenorio, para que el tema se excluyera de la discusión, pues “no era la mejor forma de empezar el proceso electoral”, ya que avizoran impugnaciones no deseables en este momento.

Oscar Moguel, de Convergencia, definía el acto como “albazo”, Schiaffino como “hecho deplorable”, mientras Xiuh Tenorio pedía dejar atrás un debate que ya se había perdido en la ALDF y dar paso a los acuerdos para otorgar certeza a los comicios del próximo año.

A ellos se sumó el consejero Néstor Vargas, quien dijo no compartir “las formas”. “Lamento mucho esta situación, tengamos la generosidad de entregar al Distrito Federal un instituto de altura, con esto queda claro que ha fallado la política”, expresó.

Anzaldo, quien guardó silencio hasta el final, se pronunció también en contra, tras señalar que estaba abierto a la interpretación más idónea de la norma, pero al final aceptó ser el presidente provisional, con el argumento de que, cualquiera que fuera la decisión, la legitimidad de este proceso la tendrán que decidir los tribunales.

La decisión ya estaba tomada; el planteamiento del PAN fue avalado por Juan Carlos Beltrán, representante de la bancada del PRD e integrante de Nueva Izquierda (NI); por Jorge Carlos Díaz Cuervo, a nombre de los socialdemócratas, y por los consejeros Carla Humphrey, Fernando Díaz Naranjo, Yolanda Columba y Angel Díaz Ortiz.

Revancha del PAN

En la ALDF, los diputados del PRD que integran el llamado G-17 calificaron este relevo como una “revancha del PAN ante el fracaso que tuvo el órgano legislativo para destituir a los consejeros electorales; además, expresa claramente su interés por desestabilizar la elección de 2009, al propiciar un golpe de mano en contra del IEDF y particularmente de Isidro Cisneros”.

Entrevistado vía telefónica, Agustín Guerrero dijo que ese acto ilegal contraviene lo que dispuso la Corte, en el sentido de que esos consejeros duraran en su encargo todo el tiempo para el que fueron electos, y en particular Cisneros como consejero presidente.

Con todo y ello, confió en que si Cisneros promueve un amparo contra su remoción, “los tribunales restablecerán la legalidad en el instituto y le otorgarán la suspensión provisional”.

 
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