Usted está aquí: viernes 19 de septiembre de 2008 Espectáculos México era un lugar chingón para vivir, dice Diego Luna

■ Motivó a niños en el Festival de Cine Latino de Los Ángeles

México era un lugar chingón para vivir, dice Diego Luna

■ Fue espeluznante lo de Morelia... dan ganas de salir corriendo

Ana Lilia Cortés (Especial)

Ampliar la imagen Diego Luna participó en el Programa Joven de la duodécima edición del Festival Internacional de Cine Latino de Los Ángeles Diego Luna participó en el Programa Joven de la duodécima edición del Festival Internacional de Cine Latino de Los Ángeles Foto: Juan Carlos Olivera

Los Ángeles, 18 de septiembre. Los cientos de alumnos de secundaria que acudieron al Programa Joven de la duodécima edición del Festival Internacional de Cine Latino de Los Ángeles no creían la sorpresa que les esperaba cuando encendieron las luces tras disfrutar de un documental motivacional en el Teatro Egipcio, en Hollywood.

Reaccionaron con gritos y aplausos cuando vieron que el actor Diego Luna acudió a convocarlos a estudiar y atreverse a alcanzar sus metas: “Yo empecé a actuar antes de cumplir los siete años, cuando era más joven que todos ustedes, ya tengo 23 años en esto y si yo lo logré, ustedes también pueden.”

Después, en entrevista, explicó lo que tiene que decir como productor y cineasta.

“Lo hago porque creo que nuestro país lo necesita, es espantoso sentir que la realidad que se vive en México es de antemano un fuerte peso, y no poder hablar ni exteriorizarlo me parece muy peligroso, porque entonces es como una olla exprés, se van cargando las cosas. En este caso siento que el cine y los documentales son como una válvula de escape, maneras de vomitar toda esa necesidad que tenemos de reflexionar, y es que creo que hay una fractura gravísima entre lo que uno se imagina para sus hijos y la realidad en que uno vive.”

–Hay generaciones de cineastas cada vez más jóvenes.

–Sí, y están conquistando espacios muy importantes, porque queremos hablar, comunicar y conectar, que es lo más importante.

–En México se han rebasado los límites, al extremo de que se registró un atentado grave en Michoacán.

–Sí, México me preocupa muchísimo porque cada vez se está convirtiendo más en un lugar sin control, me parece espeluznante lo que pasó en Morelia y que se haya cruzado esa línea, porque el único consuelo de tontos que teníamos era que la guerra en la que vivíamos no tenía nada que ver con nosotros, aunque igual estábamos expuestos a toda esa violencia, pero ahora resulta que en una plaza pública, en una enorme concentración popular, truenan granadas, mueren personas y hay decenas de heridos, ¡de plano no se vale!

–¿Qué sientes al saber que en México continúa la escalada de violencia?

–Estoy muy triste y evidentemente el cine tiene una labor muy importante ahora que está pasando ésto, porque no sólo hay que retratar la realidad, también hay que recordarnos por qué queremos a México, por qué nos sentimos parte de él, y tratar de rescatarlo en todas las disciplinas artísticas, no sólo en el cine, para que nunca olvidemos por qué nuestro país era un lugar tan chingón para vivir, porque hoy en día dan ganas de salir corriendo. Es difícil hablar tan pronto de lo que pasó y cómo realmente me afecta, pero ahorita puedo decir que el choque es muy fuerte.

–Cómo es el México que recuerdas y que te gustaría plasmar en cine.

–Nuestro país definitivamente era otra cosa y la participación de México en las guerras y frente a la violencia era muy distinto, recuerdo que el Escuadrón 201 representaba mucho de como México interactuaba con esa necesidad del mundo de atacarse unos a otros para demostrarse poder, siempre figuraba de manera cantinflesca al respecto y ahora no, nuestra actual relación con la violencia es muy cercana y viene desde hace tiempo, no desde los recientes cuatro secuestros, como alguna gente quiere hacer ver, es una violencia que crece todos los días producto de la impunidad que hay en nuestro país, y la desigualdad tan triste y patética que se vive, es gravísimo.

Amigos de la infancia

–Con todas esas reflexiones, ¿qué proyectos tienes como productor y director?

–No sé exactamente, pienso hacer una película pronto, estoy escribiendo el guión, pero estamos haciendo muchos proyectos, sobre todo con “Ambulante”, y ahora distribuimos documentales todo el año.

–Es mágico que Gael García Bernal, amigo de la infancia, siga siendo tu gran compañero y cómplice en la carrera e inquietudes que comparten.

–Sí, a finales de diciembre se estrena Rudo y cursi en la que otra vez actuamos juntos; nos acompañamos en el trabajo y en la vida, por suerte hemos cuidado muy bien nuestra relación personal.

“Creo que saber cuidar a las amistades y a la gente que amas es clave para ser feliz y no estar solo.”

 
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