Usted está aquí: sábado 4 de octubre de 2008 Mundo Habrá desacato si renuncia en pleno la Corte Suprema de Ecuador: Asamblea Constituyente

■ Inaugura el presidente Rafael Correa una reunión de ex mandatarios de América Latina

Habrá desacato si renuncia en pleno la Corte Suprema de Ecuador: Asamblea Constituyente

Pl y Afp

Quito, 3 de octubre. El presidente de la Asamblea Constituyente ecuatoriana, Fernando Cordero, denunció hoy que la amenaza de los 31 magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de renunciar cuando entre en vigor la nueva Constitución sería un “desacato” que generaría un grave vacío de poder en el actual periodo de transición.

El funcionario advirtió que el acto de “chantaje” de los miembros de la CSJ podría boicotear en los hechos la nueva Carta Magna, a pesar de que ésta haya sido aprobada con más de 60 por ciento de los votos en el referendo del pasado 28 de septiembre.

Según un análisis de la agencia Prensa Latina, los jueces se oponen al proyecto del mandatario Rafael Correa porque bajo las nuevas condiciones legales el número de ellos se reduce a 21, y los actuales titulares serán sustituidos para después asignar sus cargos mediante sorteo público.

La resistencia de los jueces a la nueva Constitución generó otras reacciones de crítica y rechazo. Un grupo de estudiantes universitarios se manifestó afuera de la CSJ para exigir que sus actuales encargados obedezcan el mandato popular expresado en el referendo, y amenazó con tomar la sede en caso de que la negativa continúe.

Por su parte, el ministro de Justicia, Gustavo Jalkh, anunció que si los 31 magistrados deciden renunciar, sus labores serían cubiertas por los llamados conjueces –sustitutos de los jueces titulares–, y adelantó que su cartera ya está elaborando las leyes secundarias que permitan una mejor aplicación de la Constitución.

Mientras, Correa inauguró este viernes en el puerto de Guayaquil (suroeste) un encuentro de ex mandatarios de América Latina, espacio en el cual discutirán sobre las tareas que deberían seguir los países de la región en los próximos 20 años para abatir la pobreza y fortalecer la democracia.

Ante ex gobernantes de México, Perú, Bolivia, Colombia, Panamá, Ecuador, Argentina, Honduras y Costa Rica, Correa hizo una exposición de los programas sociales que aplica su gobierno para tratar de resolver la crisis alimentaria y la inflación a escala mundial.

Aprovechó el foro para hacer una defensa de su gestión, que calificó de popular y no populista, y señaló que “parece que finalmente la verdadera democracia está llegando a la región.”

El mandatario ecuatoriano afirmó que el suyo “es un gobierno técnico, profundamente responsable y comprometido con el pueblo”, al tiempo que criticó a los regímenes que prefieren darle más importancia a ciertos aspectos económicos que al bienestar de la sociedad.

 
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