Usted está aquí: jueves 9 de octubre de 2008 Política Buscan Rusia y México fórmulas conjuntas contra la crisis mundial

■ La titular de la SRE se reunió en Moscú con su homólogo Lavrov

Buscan Rusia y México fórmulas conjuntas contra la crisis mundial

■ Medvediev intentó obtener respaldo a su incursión militar en Georgia

Juan Pablo Duch (Corresponsal)

Moscú, 8 de octubre. Con una balanza comercial que el año pasado alcanzó su máximo histórico –entre 700 millones y 900 millones de dólares, según datos de Rusia y México, respectivamente–, pero que no satisface ni a uno ni otro país por el potencial de sus economías aún desaprovechado, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, Patricia Espinosa, y su colega ruso, Serguei Lavrov, coincidieron este miércoles aquí en la necesidad de impulsar la cooperación bilateral y de encontrar fórmulas conjuntas que permitan afrontar las graves consecuencias de la actual crisis financiera global.

Espinosa realiza una visita oficial a Rusia, la séptima de un canciller mexicano desde que Antonio Carrillo Flores vino a este país, hace ya 40 años, y la siguiente desde que Rosario Green estuvo en esta capital, en febrero de 2000.

La titular de la SRE destacó “el excelente nivel” de la relación bilateral y el interés recíproco por mantener la dinámica positiva de realizar con regularidad visitas de jefes de Estado. A pregunta de La Jornada, precisó que todavía no se ha fijado fecha para un eventual viaje a México del presidente Dimitri Medvediev, a quien ahora le habría correspondido hacerlo después de que en 2005 Vicente Fox vino a Moscú.

Indefinida, fecha de visita al país

Así, se descarta que el mandatario ruso vaya a México antes o después de participar en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), que tendrá lugar en diciembre próximo en Lima, Perú. En cambio, es muy probable que aproveche su desplazamiento a América Latina para encontrarse de nuevo con Hugo Chávez, en Venezuela, cuyos detalles se habrían definido en la reunión que sostuvo ayer Lavrov con el canciller de ese país, Nicolás Maduro.

Al término de sus conversaciones, los jefes de las diplomacias mexicana y rusa firmaron un comunicado conjunto, el cual resume las coincidencias entre ambas naciones en materia de política internacional, establece propósitos comunes y enumera asignaturas pendientes.

El documento no contiene ninguna discrepancia de fondo y, en el proceso de negociación del comunicado, se logró encontrar una fórmula de transacción respecto al espinoso tema de la crisis del Cáucaso.

Hasta donde ha podido saberse, Rusia quería que México, sin llegar al imposible extremo de reconocer la independencia de Osetia del Sur y Abjazia, aceptara un párrafo de apoyo a la operación militar rusa en respuesta a la “agresión de Georgia”, mientras México insistió en hacer referencia a la Carta de Naciones Unidas como fundamento para un arreglo político.

En cambio, ambos países tienen muy claro que el mundo “se enfrenta a retos y desafíos globales sin precedente que sólo podrán ser superados mediante la cooperación internacional, como la crisis de precios de alimentos y energéticos, terrorismo, tráfico de drogas, crimen internacional, cambio climático e inestabilidad financiera global, entre otros”.

Para encontrar soluciones “eficaces e incluyentes” a todos estos problemas, resulta esencial “fortalecer el multilateralismo”, subraya el documento.

En la misma línea de la reciente conclusión del Banco Mundial de que “ya no funciona” el sistema multilateral vigente, México y Rusia señalan que es indispensable propiciar “la plena participación de las naciones en desarrollo en la toma de decisiones y en el proceso de adopción de normas”, para lo cual están de acuerdo en seguir estimulando un diálogo constructivo del Grupo de los Ocho países más industrializados con Brasil, China, India, México y Sudáfrica, integrantes del llamado Grupo de los Cinco.

Por fortuna, en el plano bilateral, ya son anécdota los anuncios espectaculares que acostumbraba hacer Vicente Fox, como el hasta la fecha no firmado contrato para “asegurar abasto oportuno y a buen precio de gas líquido ruso a México durante los próximos 20 años”, lanzado como golpe de efecto en 2004 y que, mientras no se concrete, no es sino prototipo del foxiano vicio de dar como hechos consumados simples posibilidades.

Posibilidades, pero con los pies en el suelo, sobre todo tomando en cuenta el contexto desfavorable que genera la crisis financiera en todo el mundo, es lo que intentará perfilar este jueves Patricia Espinosa con la ministra de Desarrollo Económico y Comercio de Rusia, Elvira Nabiullina.

México y Rusia van a ratificar su compromiso de agilizar los trabajos preparatorios de la cuarta reunión de la comisión mixta de cooperación económico-comercial, científico-técnica y de transporte marítimo, igual que del segundo Foro de Negocios entre México y Rusia, que tendrán lugar en Moscú.

 
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