Usted está aquí: miércoles 15 de octubre de 2008 Cultura La delación “no tuvo lugar”, responde Milan Kundera

■ Acusa al instituto checo y la revista Repekt de “asesinar a un escritor”

La delación “no tuvo lugar”, responde Milan Kundera

■ La divulgación de la noticia puede erosionar la fama del literato, afirma una periodista

■ Saber quién entregó a Miroslav Dvoracek “no cambia nada”, manifiesta su esposa

The Independent y agencias

Ampliar la imagen Milan Kundera, autor del libro La insoportable levedad del ser Milan Kundera, autor del libro La insoportable levedad del ser

Praga, 14 de octubre. El escritor Milan Kundera negó haber sido informante de la policía secreta durante el régimen comunista en la antigua Checoslovaquia.

El autor de La insoportable levedad del ser dijo a la agencia checa CTK que las denuncias que lo señalan como delator de un opositor al régimen lo han tomado “totalmente desprevenido, no me lo esperaba” y aseguró que eso “no tuvo lugar”.

Kundera, radicado en París desde 1975, respondió así vía telefónica al reportaje publicado el lunes por la revista Repekt, donde se afirma que en 1950 reveló a la policía comunista el paradero de Miroslav Dvoracek, joven activista opositor al régimen, piloto aviador del ejército, del que desertó para integrarse a los servicios de espionaje estadunidenses.

Como resultado de la presunta delación de Kundera, Dvoracek fue detenido y condenado a 22 años de prisión, de los cuales pasó 14 encerrado, la mayor parte en un campo de trabajos forzados en una mina de uranio.

El autor del reportaje en Repekt es el historiador Adam Hradilek, quien basa sus afirmaciones en un documento localizado en los archivos del Instituto de Estudios de los Regímenes Totalitarios, creado en 2007 para investigar la historia del gobierno comunista.

Facsímil en Praga

La controversia que envuelve al autor de La vida está en otra parte recuerda la situación enfrentada en 2006 por el alemán Gunter Grass, quien en una entrevista con un diario alemán admitió haber pertenecido en su juventud a las Waffen SS, policía de elite del nazismo.

Grass hizo la revelación en vísperas de la aparición de sus memorias, donde daba cuenta del hecho. “Mirando en retrospectiva, siempre lo sentí como una mácula, que me afligía y sobre la que no podía hablar. Era algo que alguna vez debía quedar escrito”, dijo entonces el premio Nobel de Literatura alemán, quien se ha distinguido como conciencia crítica de su país.

Ahora, tras rechazar los señalamientos que se le hacen, Kundera acusó a su vez al instituto y a la revista de “asesinar a un escritor”.

Según detalla Anne Penketh en el diario británico The Independent, Dvoracek visitó a una amiga estudiante en Praga y dejó un portafolios en su dormitorio. Ella le contó a su novio y éste se lo dijo a Kundera. Dvoracek fue detenido cuando regresó a recoger el portafolios.

Los hechos dados a conocer por Repekt –hace notar Penketh– parecen extraídos de novelas de Kundera como La broma, amarga sátira que denuncia el talante represivo e intolerante del régimen comunista en Checoslovaquia, país hoy dividido en Eslovaquia y República Checa.

Al respecto, también es emblemática La insoportable levedad del ser, en la cual Kundera recrea el aplastamiento de la Primavera de Praga, periodo en que Alexander Dubcek promovió importantes reformas liberales que concluyeron con su derrocamiento y la invasión de Checoslovaquia por las tropas soviéticas en 1968.

Con una singular historia de amor como argumento central, Kundera hace una reflexión deslumbrante sobre la libertad, la censura, el arte, la política, el sexo y la muerte física y social en un sistema totalitario.

Anne Penketh considera que, aun cuando se sabe que los regímenes totalitarios chantajeaban a los ciudadanos para procurar su lealtad, la divulgación hecha por Repekt puede erosionar la fama de Kundera.

Como muchos de su generación, el escritor se afilió al Partido Comunista checo cuando era estudiante, pero fue expulsado después de criticar la naturaleza totalitaria del régimen. Posteriormente trasladó esta experiencia a su novela La broma.

Dvoracek, de 80 años, vive en Suecia, donde recientemente sufrió un ataque cardiaco. Fue su esposa, Marketa Dvoracek Novak, la encargada de comentar las revelaciones hechas por Repekt. En declaraciones a la agencia Afp, la mujer sostuvo que saber quien delató a su esposo “no cambia nada.

“Entre los famosos de la época, muchos eran fanáticos del régimen comunista en los años 50. Luego cambiaron de campo en 1968 y empezaron a promulgar la libertad, escondiendo en sus maletas lo que hicieron en los años 50”, dijo.

El facsímil del informe 624/1950, en el cual consta la presunta delación de Kundera, está a disposición del público en la página web del Instituto de Estudios de los Regímenes Totalitarios (www.ustrcr.cz). Fue redactado el 14 de marzo de 1950 por un inspector de la sección II del OVNB (comando barrial de seguridad nacional) de Praga.

 
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