■ Pierden republicanos puestos que habían ganado por décadas en oeste y sur del país
Amplía el Partido Demócrata su margen de dominio en las dos cámaras del Congreso
■ Cientos de resoluciones en disputa; en California se impone la prohibición a matrimonios gay
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Ann Nixon Cooper, de 106 años, cuyos padres fueron esclavos, recibe a reporteros en su hogar ubicado en Atlanta, luego del reconocimiento que le hizo Barack Obama desde Chicago durante su discurso como ganador de la elección presidencial, en el que aludió a la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos
Foto: Ap
Nueva York, 5 noviembre. Barack Obama gobernará con la mayoría legislativa demócrata más amplia en una generación después de que los resultados electorales de ayer ampliaron el margen del dominio de su partido en las dos cámaras del Congreso.
La oleada que llevó a Obama a la presidencia también arrastró a la derrota a legisladores republicanos por todo el país, y con ello la mayoría demócrata amplió su control en el Senado con por lo menos cinco puestos más, y hasta por 19 más en la cámara baja. Aún hay unas cuantas contiendas en disputa que podrían añadir unos cuantos legisladores más a la bancada demócrata.
El equilibrio del poder en el Senado después de los resultados de anoche son de 56 demócratas contra 40 republicanos (están por determinarse cuatro contiendas más). En la cámara baja los demócratas tienen mayoría de 254 contra 173, con unos ocho puestos aún por determinarse.
Entre las batallas más notables, los demócratas conquistaron puestos que han estado en manos republicanas durante décadas, particularmente en el sur y en el oeste. Ganaron escaños para el Senado en Virginia, Colorado y Nuevo México, pero sobre todo en Carolina del Norte, donde derrotaron a Elizabeth Dole, una de las figuras más reconocidas a nivel nacional del Partido Republicano.
En lo que fue tal vez la contienda más curiosa, el senador republicano Ted Stevens, de Alaska, está por ganar su elección no obstante que hace una semana fue enjuiciado y culpado de siete delitos por corrupción, y aunque podría triunfar, es posible que sea expulsado de la cámara alta por sus colegas.
El senador republicano de alto rango John Ensign declaró a Fox News anoche que “obviamente esperábamos este tipo de jornada”, ya que enfrentan un clima político adverso, “aún más difícil que el de Watergate”.
En la cámara baja uno de los resultados fue la derrota del representante Christopher Asís, republicano moderado, y el último representante de ese partido en toda la región de Nueva Inglaterra, la cual ahora es ciento por ciento demócrata. Asís habló por muchos de los derrotados de su partido al culpar a “un tsunami” provocado tanto por la desaprobación del presidente George W. Bush como por la crisis económica. Según algunos cálculos, casi todos los distritos urbanos del país ahora están en manos demócratas.
Pero algunos republicanos, particularmente en las zonas más conservadoras, lograron defender su terreno. En el Senado, el líder de la bancada republicana, Mitch McConnell, libró una intensa batalla para prevalecer y ahora será el republicano de más alto rango en Washington. En la cámara baja, los tres representantes cubanoestadunidenses, Lincoln Díaz Balart, Mario Díaz Balart e Ileana Ros Lehtinen lograron superar los esfuerzos de los retadores más poderosos que han enfrentando en sus carreras. Sin embargo, al formar parte de una minoría ahora más debilitada que nunca con una Casa Blanca a la cual tendrán menos acceso, el poder de la cúpula conservadora cubanoestadunidense podría estar en su momento más débil en 50 años.
Hablando de los resultados en las elecciones legislativas, Harry Reid, líder de la mayoría demócrata en el Senado, dijo que “no es un mandato por un partido o ideología, sino un mandato por el cambio”, reportó la agencia Ap.
Los demócratas también incrementaron su presencia en los gobiernos estatales al ganar siete, mientras los republicanos se llevaron cuatro, y ahora en el país hay 29 gobernadores demócratas y 21 republicanos (sólo estuvieron en juego 11 gubernaturas en esta elección general).
Entre cientos de resoluciones que estaban en disputa por referéndum a nivel estatal en esta elección, la de mayor perfil fue una para prohibir el matrimonio gay en California y revertir así un fallo de la Suprema Corte de ese estado, la cual ganó por 52 por ciento contra 48 por ciento del voto, lo que ahora pone en duda unos 18 mil matrimonios gay que se han celebrado en los últimos meses.
Esa contienda se ubica entre las más caras de la historia con la recaudación de unos 70 millones de dólares entre los dos partidos. Los votantes en Florida y Arizona también bloquearon los matrimonios gay. En Arkansas se prohibió que las parejas no casadas (más bien las gay) adopten hijos. Pero en Connecticut los votantes protegieron el fallo judicial en su estado y aprobaron el matrimonio gay.
En el estado de Washington los votantes aprobaron una resolución que permite el suicidio asistido por médicos; en Massachusetts se aprobó una medida para que los arrestados con menos de una onza de mariguana ya no enfrenten penas criminales y ahora sólo entreguen la yerba y paguen una multa de 100 dólares. En Michigan, a pacientes bajo tratamiento médico les será permitido registrarse para cultivar, comprar y usar mariguana.
En Missouri se aprobó una resolución que establece el inglés como idioma oficial (¿será que esta nota no podrá ser leída por un funcionario estatal?)
El mapa electoral de este país cambió con esta elección, y ahora se verá si se traduce en un cambio en el mapa político de Washington. Vale recordar que Bill Clinton también llegó al poder con una amplia mayoría legislativa de su partido, pero fue obligado a depender de un sector de la minoría republicana para impulsar algunas de sus iniciativas, entre ellas el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (opuesto por una mayoría de sus partidarios).