■ El nuevo inquilino del Palacio de Covián defiende su pasado
“No soy hombre de maniobras ocultas”
El nuevo secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, defendió su pasado como abogado penalista y aseguró que la “mayoría” de asuntos en los que litigó están “felizmente acabados”.
El funcionario aseveró que, al igual que lo hizo en los juzgados, en Bucareli se conducirá con “transparencia y discreción”, porque “no soy hombre de maniobras ocultas”. También manifestó que es “un hombre sin grupo político”, y que en los próximos días decidirá si permanece o no como integrante del Comité Ejecutivo Nacional de su partido, el PAN.
En su primera conferencia de prensa ofreció diálogo, respeto y su “mano abierta” para buscar acuerdos con la izquierda, y ante las críticas a su trayectoria profesional (en la defensa de banqueros y funcionarios acusados de fraude) dijo que tales ejercicios le permitieron entrenarse en el “manejo, interpretación y estudio del derecho, herramienta fundamental en el ejercicio de esta secretaría”.
Durante estos años –agregó– “constantemente frente a problemas donde convergían una cantidad enorme de intereses, tuve que enfrentar y discriminar los que pudieran resultar en conflicto para mantener muy claras mis lealtades. Sé del conflicto de intereses y sé de las maneras para evitarlo”.
En punto de las dos de la tarde, seis horas después de haber rendido protesta ante el presidente Felipe Calderón, el nuevo responsable de la política interna dijo que seguirá la pauta que marcó su antecesor, Juan Camilo Mouriño –muerto el martes pasado al desplomarse el avión en que viajaba–, respecto al “diálogo respetuoso e institucional” con los poderes, independientemente de la procedencia partidista de sus integrantes.
Gómez Mont, quien estuvo en favor del proceso de desafuero a Andrés Manuel López Obrador –consumado en 2005–, comentó: “Yo no fui parte del proceso de desafuero, pero di mi opinión en su momento y está ahí registrada”. Sin embargo, agregó, los retos que enfrenta México son “de aquí, ahora y hacia delante.
“No espero desencuentros, espero tener la oportunidad y el tiempo de acreditar que vengo aquí a facilitar la construcción de acuerdos que sirvan a quienes los celebren, no a quienes los arreglen”, respondió.
Cuando se le insistió en su pertenencia a un grupo de abogados panistas que han defendido intereses que parecieran contrarios a los del gobierno federal o del Estado mexicano, el nuevo secretario de Gobernación dijo que “no hay que investigar mucho (acerca de la larga lista de sus defendidos)”.
Indicó que patrocinó como abogado asuntos “de cara abierta a la sociedad, frente a las instituciones, mediante los procedimientos legales y con la diversa suerte que corrieron dichos casos”.
Expresó que no era un hombre de maniobras ocultas: “Mi responsabilidad profesional fue cumplida a la luz de quien tenía interés en esos asuntos y bajo la discreción a la que estaba obligado hacerlo”.
Respecto de su compromiso para combatir al crimen organizado desde su posición de titular de Gobernación y secretario Ejecutivo del Consejo de Seguridad Nacional, señaló que está comprometido a “despejar” los actos de violencia y utilizar todos los recursos que tiene el Estado para ello.
“Mi compromiso es enfrentarlos en la medida de mis responsabilidades y en auxilio de las autoridades que tienen competencias en la materia”, dijo.
El ahora secretario de Gobernación declinó opinar respecto de la posibilidad de cambios en su equipo inmediato.