■ México enfrenta un déficit de granos y oleaginosas de 14.8 millones de toneladas
Reprueban legisladores uso de biocombustibles
México tiene un déficit en su balanza comercial de granos y oleaginosas de 14.8 millones de toneladas, en tanto que el gasto agropecuario pasó, en las pasadas dos décadas, de 3.2 a 0.6 por ciento del PIB, asentó el Frente Nacional de Legisladores del Sector Rural en un estudio que entregó a la Confederación Nacional Campesina.
En el documento, los legisladores que integran dicho frente consideraron alarmante la pérdida en la balanza de granos básicos en comparación a la que se tenía hace tres lustros. Dichos datos demuestran que el modelo neoliberal ha fracasado, como incluso ya lo reconoce el Banco Mundial, y que hacen falta nuevas políticas y estrategias para combatir la pobreza, las desigualdades sociales extremas y el estancamiento económico que agobia a las sociedades.
Destacaron que el precio de los cereales y oleaginosas se ha incrementado en 144 y 157 por ciento en promedio, respectivamente, en los mercados internacionales en sólo tres años.
Heladio Ramírez López, presidente de la agrupación y de la Comisión de Desarrollo Rural del Senado, se pronunció en contra del uso de granos y oleaginosas para la elaboración de agrocombustibles y condenó la decisión de los países ricos, encabezados por Estados Unidos, Rusia y las naciones europeas, de utilizarlos como alternativa para hacer frente a la escasez del petróleo.
Por la escasez y altos precios de esos alimentos, que sufren los países y sectores más pobres del mundo, es inaceptable que Canadá, Estados Unidos y Rusia hayan optado por sembrar más de 5 millones de hectáreas –antes destinadas al trigo– de maíz y soya, con el propósito de fomentar la producción de etanol y biodiesel para la industria automotriz.