■ Torrado y Riveros son buenos, pero al lado tengo a Romagnoli, que es el mejor: afirmó

Toluca es sin duda más equipo y vamos a ganar: Israel López

■ Estamos en la final porque los Diablos Rojos son un buen plantel, no por sus individualidades, dijo el argentino

■ El medio campo será básico en la serie: Cristante

■ Ya siento la adrenalina: Chepo

Marlene Santos Alejo (Enviada)

Toluca, Edomex, 9 de diciembre. El recio y eficaz medio de contención Martín Romagnoli es de pocas palabras. Rehúye entrevistas y, si se ve forzado ante el micrófono, es breve y contundente: “Cuando vienen los atacantes siempre tengo mucha fe de quitarles el balón y recuperarlo para el equipo. Trabajo a tope con esa mentalidad”.

El jugador argentino de 31 años, aporte para los Diablos Rojos del ex técnico José Pekerman, y que ha hecho gran dupla con Israel López, reconoció que luce atractivo el duelo en el mediocampo con los cementeros Gerardo Torrado y Christian Riveros.

Del capitán celeste consideró que “es un jugador clave para Cruz Azul”, pero rehusó ponerse a la par. “Toluca está en la final porque es un buen equipo, no tanto por individualidades; yo soy uno más que contribuye para hacer bien las cosas. Aquí se trata de los Diablos Rojos y La Máquina, no de unos cuantos futbolistas”, acotó tras la práctica realizada en Metepec.

Romagnoli cumplirá en enero su primer año en México y señaló que el ambiente se siente “bárbaro”. Definió la liga como muy intensa y difícil: “me ha gustado porque tiene mucha dinámica”.

A su vez, Israel López recordó que en el conjunto celeste “tuve ocasión de jugar con Torrado y Riveros. Son de gran calidad, pero yo al lado tengo al mejor (Romagnoli) y Toluca tiene la mejor defensa y es sin duda mejor equipo. Vamos a ganar”.

No obstante, advirtió que en los botines del apodado Borrego radica mucho del buen funcionamiento de Cruz Azul.

El portero escarlata Hernán Cristante, quien en cada partido desde su privilegiada posición desmenuza el accionar del equipo, manifestó que el medio campo será básico en la serie final; “no sólo son los contenciones, porque los defensas los apoyan mucho y los delanteros achican bien.

“Vamos a tratar de hacer daño con movilidad y variantes, de tener el balón y aprovechar las oportunidades”, agregó.

El defensa Édgar Dueñas manifestó que si bien La Máquina viene de jugar la reciente final, lo que confirma un buen año de trabajo, “acá tenemos gente de experiencia que sabe manejar la presión dentro y fuera de la cancha”.

En tanto, su homólogo Manuel de la Torre destacó que para los zagueros el objetivo primordial siempre es mantener el cero en su meta, contener embates y cerrar espacios, lo cual buscarán hacer a la perfección.

El técnico José Manuel de la Torre dijo sentir ansiedad y nervios: “Siento la adrenalina, ganas de que ya empiece el partido, pero en general estoy tranquilo porque el trabajo se ha reflejado y nos tiene en esta situación de privilegio. Me siento contento, hay cosas por mejorar, pero dentro del grupo destacamos nuestras virtudes.

“Me gusta mucho platicar con los jugadores mayores, aprovecho su experiencia y su gran calidad humana para unir y manejar al grupo. Ellos me dan referencias claras acerca de muchas cosas”, anotó.

Por otra parte, en las taquillas del estadio Nemesio Diez se vivió una romería. Por la mañana la gente aún no levantaba las sillas, colchonetas y cobijas con que se cubrió de frío durante la noche que pasó ahí para conseguir un boleto.

Algunas personas pegaron cartulinas con leyendas en demanda de entradas para el partido del domingo.