Usted está aquí: martes 23 de diciembre de 2008 Cultura Cumple 20 años la Pastorela mexicana en el Museo de El Carmen

■ Se busca mantener vivas tradiciones como posadas y piñatas

Cumple 20 años la Pastorela mexicana en el Museo de El Carmen

Fabiola Palapa Quijas

El Museo de El Carmen del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presenta del 15 al 28 de diciembre su tradicional Pastorela mexicana, que llega a su 20 aniversario difundiendo esta festividad, al tiempo que ofrece un momento de entretenimiento a toda la familia.

El productor Rafael Pardo explicó que desde hace 20 años realiza la pastorela, ya que su misión es mantener vivas las tradiciones populares como las procesiones, la posada y las piñatas.

“Es la pastorela más antigua que se presenta en la ciudad de México y reúne a papás, abuelitos y niños. Junto con el INAH y el Centro Nacional para la Cultural y las Artes (CNCA) tratamos de preservar las tradiciones.

“Desde que iniciamos el proyecto se ha presentado con la participación de 25 actores y músicos de gran talento y experiencia escénica. En el equipo de producción somos más de 50 personas. Cuando empezamos éramos más arriba que abajo, pero con el tiempo hemos mejorado la producción, sobre todo en la escenografía, para que la gente se sorprenda en cada función.”

En la fiesta tradicional mexicana destaca el vestuario e iluminación del ex convento, que en la noche abre sus puertas para que la gente recorra sus pasillos, patios interiores y disfrute de una cena en el patio del acueducto.

El origen de las pastorelas mexicanas, que se celebran la semana previa al 24 de diciembre, se remonta a la época medieval; representan una manifestación popular típica del teatro mexicano, que con más de cuatro siglos de representaciones se ha convertido en un símbolo de identidad nacional vigente y en constante renovación.

“Primero se realiza la presentación de la pastorela –explicó Pardo–, después los Reyes Magos terminan con la procesión e inmediatamente se inicia un concierto con un excelente flautista que hace un recorrido de canciones populares desde la primera pieza musical que se tocó en la Nueva España hasta el siglo XIX.”

Después, “un hermano Carmelita junto con los peregrinos invita al público a pedir posada por los patios interiores del convento hasta llegar al claustro para romper la piñata. Aquí se hace una breve explicación de las posadas y las piñatas de siete picos. Finalmente en la huerta se sirve el atole con tamales de Oaxaca”.

La representación tendrá dos funciones diarias, a las 18:15 y 20:15 horas hasta el 28 de diciembre, excepto el día 24, en el Museo de El Carmen (avenida Revolución 4, San Angel).

 
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