Usted está aquí: miércoles 31 de diciembre de 2008 Política Declaran en la SIEDO los 10 miembros de La Familia capturados en Michoacán

■ Entre los detenidos se encuentra El Fresa, tercero en importancia del grupo criminal

Declaran en la SIEDO los 10 miembros de La Familia capturados en Michoacán

■ Los principales líderes de la organización inicialmente trabajaban para Osiel Cárdenas Guillén

Gustavo Castillo García

Efectivos del Ejército capturaron a 10 integrantes de grupo de narcotraficantes conocido como La Familia, en Morelia, Michoacán.

Entre los detenidos se encuentra Alberto Espinoza Barrón, El Fresa, tercer hombre en importancia en esa organización criminal con presencia en cinco entidades federativas, informaron fun- cionarios de la Procuraduría General de la República (PGR).

La noche del pasado lunes, efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realizaron cateos en diversas viviendas localizadas en la colonia Chapultepec Sur de la capital michoacana, logrando la detención de Espinoza Barrón y otros nueve miembros de La Familia.

Cabe mencionar que los principales líderes de ese grupo de narcotraficantes son Jesús Méndez Vargas, El Chango, y Nazario Moreno, El Loco. Inicialmente, ambos trabajaron bajo la jefatura de Osiel Cárdenas Guillén, líder del cártel del Golfo, pero esa sociedad desapareció con la extradición del capo a Estados Unidos, en enero de 2007.

Funcionarios de la PGR confirmaron la captura de Alberto Espinoza Barrón o Alberto Espinoza Loya, quien rinde su declaración ministerial ante personal de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), junto con los otros detenidos.

En septiembre de este año, el subprocurador de Delitos Federales, Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, informó en conferencia de prensa que “algunos grupos de la delincuencia organizada, como La Familia, han emigrado hacia otros delitos, como es el caso de la piratería que tenemos detectada en Michoacán”.

De acuerdo con informes oficiales, La Familia tiene presencia en Michoacán, Tamaulipas (en sociedad con el grupo que dirige Eduardo Costilla), estado de México, Guerrero y Veracruz, y se le vincula con diversas ejecuciones en esas entidades.

Por la noche, la Sedena emitió un comunicado confirmando la detención del narcotraficante. Informó que “fungía como jefe de la plaza” en la ciudad de Morelia, donde coordinaba el acopio de enervantes, sobresaliendo el tráfico de cocaína, misma que recibía en el puerto de Lázaro Cárdenas, procedente de Sudamérica, para su posterior traslado a Estados Unidos. Además –señala–, controlaba los puntos de distribución de droga en la ciudad de Morelia, donde realizaba sus actividades ilícitas adoptando un perfil extremadamente discreto.

“Para lograr el control de las actividades de narcotráfico en la ciudad de Morelia, Espinoza Barrón recurría a acciones de intimidación y cooptación de autoridades, logrando integrar una estructura de protección e impunidad hacia su organización delictiva; extorsionaba a personas dedicadas a la venta de mercancía ilícita y negocios formales, secuestrando a quienes se negaban a colaborar con él.

“Asimismo, contaba con grupos de sicarios en la capital del estado que se encargaban de detectar la presencia de células antagónicas, así como con grupos de colaboradores conocidos como halcones, encargados de vigilar los movimientos del personal militar y otras autoridades federales para evitar acciones en su contra”, señaló la Sedena.

 
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