Usted está aquí: sábado 31 de enero de 2009 Cultura “Daños irreversibles”, en Teotihuacán

■ Comisión de expertos del INAH hace una evaluación en un amplio dictamen técnico

“Daños irreversibles”, en Teotihuacán

Ana Mónica Rodríguez

Los daños infligidos a las pirámides del Sol y de la Luna en Teotihuacán son evidentes e irreversibles, “por eso los funcionarios del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) aceleraron el resane y cubrimiento de las perforaciones”.

Así lo diagnosticó la Comisión de Patrimonio Cultural y Legislación del instituto integrada por especialistas en arqueología, historia, antropología social, etnología, lingüística, antropología física, arquitectura y conservación de monumentos arqueológicos e históricos, quienes en centenares de páginas e innumerables fotografías documentan esos daños a los monumentos prehispánicos.

Para el montaje de Resplandor teotihuacano, consignaron los expertos, se instalaron miles de bases para soportar rieles y luminarias, además de cerca de 7 mil perforaciones realizadas en ambos monumentos y alrededor de 300 orificios más hechos de manera innecesaria, por descuido o error.

También en el dictamen técnico-académico confirman las fracturas en la piedras ancestrales por los tubos expansibles, incluidos los desprendimientos de piedra intencionales o por descuido para colocar los rieles metálicos.

También sobresalen tres conclusiones que corroboran daños al patrimonio: la afectación de contextos arqueológicos por la excavación de zanjas sin la supervisión de expertos, además de los daños a los elementos prehispánicos y restaurados que incluyen grandes bloques de piedra labrada y núcleos de piedra originales de ambas pirámides y, sobre todo, confirman la nula presencia de capas de sacrificio.

El diagnóstico abarca “la revisión cuidadosa de cada nivel donde se colocaron las bases para sostener los rieles que conducirían el cableado y las luminarias y se hizo un recuento de los daños observados en cada uno de los cuerpos de los edificios”.

En la evaluación sobresale que para el anclaje de los rieles que soportan las luminarias, se requirieron dos y cuatro perforaciones para insertar tubos expansibles, pero “la falta de planeación, supervisión y calidad en la ejecución de los trabajos, hizo que en ocasiones se realizaran de manera excedente e innecesaria hasta ocho perforaciones para una base, quedando cientos abiertas y finalmente resultaran inútiles”.

Además señalan los expertos “en algunos lugares se realizaron numerosas perforaciones sin que hubiera necesidad de instalar bases para sujetar los rieles; en otras se realizaron por error o falta de planeación, hasta 35 que no fueron usadas, lo cual demuestra que muchas se realizaron de manera arbitraria, provocando más daños de los que originalmente se supuso habían causado las perforaciones”.

El documento al que tuvo acceso La Jornada también constata las perforaciones realizadas sobre elementos prehispánicos, lo cual “demuestra la falta de supervisión de personal especializado y que los funcionarios del INAH han mentido u ocultado el daño al patrimonio arqueológico, de ahí la urgencia de tapar las perforaciones sin antes contar con un diagnóstico”.

Esa comisión concluyó que “la extracción de los cerca de 7 mil taquetes y el tapado de las perforaciones, hace que finalmente todas hayan sido inútiles o innecesarias, demostrando una falta absoluta de planeación y un grave error del presidente del Consejo de Arqueología, que aprobó este proyecto sin contar con elementos suficientes”.

Finalmente, prosiguen, al taparse las perforaciones se demuestra un daño causado por error o negligencia de los funcionarios.

Otro aspecto que constataron los especialistas es la forma en que se utilizaron los monumentos. “La gran cantidad de desechos encontrados durante el diagnóstico y las múltiples visitas, indica que directamente sobre los diferentes cuerpos de los dos basamentos más importantes de Teotihuacán se realizaron diversos trabajos de corte del aluminio.”

“Las pirámides del Sol y de la Luna fueron usadas de manera irresponsable como mesas o plataformas de trabajo, demostrando totalmente una falta de respeto y mínima educación.”

Este detallado documento será utilizado por los integrantes de la Comisión de Patrimonio Cultural y Legislación para realizar una denuncia de hechos ante las autoridades correspondientes y se finquen responsabilidades contra quienes atentaron contra ese patrimonio nacional y de la humanidad.

 
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