Centenaria
El Imparcial*
Los restos del gigante de Ixtapalapa
En terrenos pertenecientes á la Hacienda de la Purísima, jurisdicción de Ixtapalapa, en el curso de unas excavaciones que se practicaban con el objeto de completar un sistema de irrigación, los peones que abrían una zanja tropezaron con varios huesos de tamaño descomunal, en estado petrificado, que llamaron poderosamente la atención, y dieron parte desde luego á sus patrones, quienes comunicaron á su vez el hecho al Prefecto Político del pueblo mencionado.
Los huesos, que al parecer son humanos, se cree que forman parte de la osamenta de uno de aquellos hombres prehistóricos, de talla gigantesca, que se dice habitaron el planeta hace largos é incontables siglos. Se ha logrado reunir casi toda dicha osamenta, y solo falta por encontrar el cráneo y uno que otro hueso más.
Falta por averiguar si los huesos en cuestión pertenecieron á un individuo de la raza humana ó á alguno de los monstruos antediluvianos.
Mujeres que riñen
En la segunda del Salto del Agua, riñeron María de Jesús Armas y Rafaela Díaz, habiendo resultado la primera con una lesión en la ceja izquierda.
Una brava hembra
En la estación de San Lázaro la mujer Rosa Fragoso, convertida en una verdadera Fiera, arremetió contra los cargadores José Mesa y José Villagómez, á los que lesionó con una piedra que recogió en la calle, en la cabeza y la cara respectivamente.
Herido por sus hermanos
Por asuntos familiares Carlos Belmonte regañó á sus hermanos Manuel y Guillermo de propio apellido, los que disgustados por la represeión, maltrataron á Carlos, agrediendole entre los dos y causándole una herida en el rostro y otra en la cabeza, que pasó a curarse al Hospital Juárez.
*Se publicó de 1882 a 1883 y de 1897 a 1914