Zacatecas, Zac., 2 de marzo. Los migrantes mexicanos en Estados Unidos no deben hacerse falsas expectativas con el gobierno de Barack Obama en los ámbitos legal, social y laboral, porque en ese país hay un ambiente antimigrante generalizado a causa de la crisis económica y de la criminalización de los latinoamericanos por la guerra contra el narcotráfico, sostuvieron académicos y especialistas en migración y sociología de universidades estadunidenses y mexicanas, durante el foro La izquierda mexicana en Estados Unidos y las nuevas relaciones bilaterales, que concluyó el domingo.

Para la derecha y el gobierno de ese país (los latinoamericanos) somos una amenaza para su seguridad nacional, afirmó el doctor en economía Rodolfo García Zamora, coordinador del Centro de Estudios del Desarrollo en la Universidad Autónoma de Zacatecas.

Indicó que para la clase política estadunidense la migración no es un tema bilateral ni diplomático, sino un problema de seguridad nacional. Además, “la extrema derecha, siendo minoritaria, ha logrado envenenar a la opinión pública a través de los noticiarios con el planteamiento de que los inmigrantes mexicanos y latinos en general somos una amenaza”.

Una herramienta para reivindicar al migrante y al latino en Estados Unidos, señaló Rodolfo García, es difundir noticias y hechos positivos derivados de investigaciones académicas.

De igual manera, recomendó divulgar que los mexicanos que trabajan en Estados Unidos aportan por lo menos 750 mil millones de dólares al producto interno bruto de ese país, es decir, 8 por ciento. Esto no lo usamos como un argumento y se da la falsa impresión de que los estadunidenses nos hacen un gran favor, como si fuera una limosna, al dejarnos vivir en Estados Unidos, cuando somos el soporte de actividades estratégicas como la agricultura y toda la rama de servicios.

Sobre la posibilidad de que se incluya el tema de la libre movilidad laboral en una eventual revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), consideró que Estados Unidos sólo estaría dispuesto si México acepta dar acceso directo al petróleo, y yo creo que el Partido Acción Nacional aceptaría, advirtió.

Otro tema en el que coincidieron especialistas estadunidenses y mexicanos es el temor de la población anglosajona de Estados Unidos al crecimiento de la población de origen latinoamericano y la posibilidad de que se convierta en mayoría; sin embargo el peso demográfico no corresponde con el peso político.