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Los recortes presupuestales no impactarán la política social, asegura el ministro de Finanzas

Admite Hugo Chávez que la crisis mundial puede afectar a Venezuela

El ministro Juan Manuel Santos quiere convertir a Colombia en el Israel de la región, denuncia el presidente

Convoca a la formación de un frente nacional de masas y a fortalecer al PSUV

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En imagen de archivo, el gobernante de Venezuela, Hugo Chávez, que ayer en su programa Aló, Presidente!, señaló la urgencia de que la revolución bolivariana desmonte el viejo Estado burgués, antes de que él nos desmonte a nosotrosFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Lunes 9 de marzo de 2009, p. 32

Caracas, 8 de marzo. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, reconoció hoy por primera vez que su país podría enfrentar grandes dificultades económicas como consecuencia de la crisis económica mundial, pero advirtió que la revolución no se va a venir abajo y convocó a la formación de un gran frente nacional de masas y al fortalecimiento del Partido Socialista Unido de Venezuela, (PSUV), para ingresar de lleno a lo que llamó el tercer ciclo histórico del movimiento revolucionario bolivariano.

Chávez vinculó los temas de la economía, la organización política y social de los venezolanos durante la emisión del programa dominincal Aló, Presidente!, en el cual también acusó al ministro de Defensa de Colombia, Juan Manuel Santos, de querer convertir a su país en el Israel de la región, con el respaldo de las corrientes militaristas de extrema derecha de Estados Unidos, porque desean un conflicto entre ambas naciones sudamericanas.

Cuidado presidente (colombiano Álvaro) Uribe, creo que tenemos que ser responsables en esto y preservar la paz, puntualizó el mandatario al hablar de las relaciones con el gobierno de Colombia, a propósito de las acusaciones lanzadas en medios informativos colombianos a principios de la semana, en el sentido de que Venezuela aloja a dirigentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.

En breve referencia a los problemas económicos mundiales, Chávez dijo que la revolución no se va a venir abajo por los problemas económicos que puedan derivar de la crisis mundial, pero eso no significa que no pudiéramos entrar nosotros en un periodo de grandes dificultades.

El comentario de Chávez dio pie a que el ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, ofreciera más detalles durante una entrevista difundida por la cadena Televen.

Estamos haciendo ajustes en el gasto público, hemos trazado una política de austeridad eliminando muchos gastos que en época de abundancia quizá no se noten mucho y entre los cuales se incluye la compra de vehículos nuevos, a veces innecesarios, y la realización de viajes que pueden ser de utilidad, pero no son tan indispensables.

Lo dicho por Rodríguez coincide con la idea expresada por Chávez en Aló, Presidente!, de cuidar hasta el último dólar (y) el último bolívar.

Rodríguez precisó que los recortes presupuestales no afectan la política social y apuntó que el presupuesto de 2009 se calculó con base en una proyección de 60 dólares por barril, lejos de los 130 dólares que alcanzó en 2008. Actualmente se ubica en 36.33 dólares por unidad.

Venezuela, que obtiene 90 por ciento de sus divisas de la exportación de crudo, ha registrado cinco años consecutivos de crecimiento en su producto interno bruto, aunque la tasa en 2008 fue de 4.8 por ciento, 1.2 puntos porcentuales abajo de la previsión gubernamental. En 2007 la economía creció todavía a un ritmo de 8.4 por ciento.

El ministro dijo que por efecto de los altos ingresos gubernamentales, el país cuenta con un fondo de estabilización monetaria de 57 mil millones de dólares y otro conformado con China de 12 mil millones de dólares.

En la transmisión del programa televisivo desde el Salón Ayacucho del palacio presidencial de Miraflores, Chávez habló ampliamente de las acciones que debe emprender la revolución bolivariana en los próximos años, una vez aprobada en un referendo celebrado en febrero pasado la reforma constitucional que autoriza la postulación continua en todos los cargos públicos, incluido el del jefe de Estado.

Usemos ese poder que no es nuestro, sino otorgado por el pueblo, en función de la satisfacción de sus necesidades, sobre todo las de los más pobres, propuso Chávez, para luego señalar la urgencia de que la revolución bolivariana desmonte el viejo Estado burgués, antes de que él nos desmonte a nosotros. Ya superadas las batallas electorales, trabajemos en lo que nos corresponde y modifiquemos leyes que favorecen a los poderosos de siempre, dijo.

Como parte de su exposición, Chávez explicó que el tercer ciclo histórico de la revolución bolivariana socialista se extenderá hasta febrero de 2019, año del nacimiento de la República fundada por Simón Bolívar.

Esos diez años incluyen los cuatro que restan de su actual presidencia y los seis del próximo mandato, que los venezolanos tendrán que decidir en las elecciones de 2012, para las cuales Chávez anticipó su voluntad de ser candidato del PSUV.

Pero mientras llega el periodo de campaña es necesario que los “comités por el ” que impulsaron el triunfo en el referendo de febrero, se conviertan en comités socialistas, destacó el presidente, al referirse a la importancia de continuar con el fortalecimiento del PSUV –resultado de la fusión de organizaciones políticas que le han apoyado desde su primera victoria electoral en 1999–, que actualmente tiene seis millones de afiliados.

Chávez dijo que para reforzar la estructura del PSUV, su buró político aprobó la creación del Gran Frente Nacional de Masas, que además ayudará a consolidar el proceso revolucionario con respaldo de los movimientos comunitarios y sectoriales, así como de las misiones (programas gubernamentales que han cubierto necesidades de salud y educación).

El PSUV realizará entre agosto y septiembre un congreso extraordinario en el que los llamados batallones socialistas y los dirigentes del partido tendrán que debatir mecanismos de creación y funcionamiento del frente.

En medio de la discusión de los proyectos bolivarianos, Chávez presentó en el programa televisivo a la ministra del Poder Popular para las Comunas, Érika Farías, quien destacó que actualmente, estamos en una etapa de elaboración, estudiando el territorio y las actividades productivas para la conformación de las comunas.

Farías dijo que su despacho busca potenciar la organización comunal desarrollada en los últimos 10 años por medio de los distintos comités de trabajo.

La expectativa no es más que construir las bases del socialismo con el pueblo, de un nuevo modelo de producción, educación, conciencia y cultura que nos permitirá avanzar hacia la patria que queremos, explicó Farías.

Sobre la propuesta de Chávez de que las comunas de Caracas puedan tener tierra productiva en los estados llaneros del país, Farías destacó que este proyecto comenzó ya a ser ejecutado por la Misión 13 de Abril.

La idea es que las comunidades organizadas de Caracas puedan tener una actividad productiva en el interior del país y contribuir con el sector de alimentos, dijo.