Después de dos años bajo su dirección, y a seis días de defender el título en 50 kilómetros en el encuentro internacional de marcha en Chihuahua, Jesús Sánchez decidió terminar su nexo con el entrenador Raúl González.

Esta situación no me afectará y llegaré a Chihuahua a buscar el boleto al Mundial de Atletismo, en Berlín (agosto); si gano, será excelente, manifestó el andarín, quien le dará las gracias al doble medallista olímpico.

La decisión, confesó el voceador, se debió a que se negaba a entregar el programa de trabajo al fideicomiso Compromiso Integral de México con sus Atletas (CIMA), además de las broncas que tiene con directivos de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte y el Comité Olímpico Mexicano (COM).

“No soy malagradecido, pero estas cuestiones administrativas me afectan. La gota que derramó el vaso fue que teníamos un campamento en Bolivia (en febrero), pero no se hizo, y al pedirle alternativas, sólo me daba largas.

Aguanté mucho, en las buenas y en las malas con él; hace 15 días tomé la decisión, hice un chequeo el sábado, de 25 kilómetros en Cuemanco, y no he parado; el jueves me voy a Chihuahua.

Dijo tener ofertas para integrarse al grupo de Rubén Arikado, Mario Solís y Germán Sánchez, y en las próximas dos semanas tendrá una reunión con autoridades de CIMA para continuar con sus planes de la presente temporada.

Luego de la terapia recibida ayer en el servicio médico del COM, como parte de su recuperación de una tendinitis, consideró que los mexicanos deben ser los rivales a vencer en Chihuahua.