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Producto de la instalación del espectáculo multimedia, acusan

Denuncian daños en bajorrelieve y grieta de 30 metros en El Tajín

Se reportaron las afectaciones y el INAH guarda silencio: custodios

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Bajorrelieve de cabeza de serpiente dañado en la explanada del Juego de Pelota, en El TajínFoto Sergio Hernández Vega
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 21 de marzo de 2009, p. 8

El Tajín, Ver., 20 de marzo. La colocación de equipo de iluminación y cableado en las pirámides de El Tajín ya arrojó los primeros daños a la zona arqueológica, considerada Patrimonio Cultural de la Humanidad, pues un bajorrelieve fue dañado a martillazos por manos extrañas el domingo 15 de marzo.

Custodios de la zona arqueológica revelaron el daño a una cabeza de serpiente que se encuentra en uno de los muros de la explanada del Juego de Pelota 17-27; pese a que se reportó el hecho al Consejo Nacional de Arqueológica del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el organismo ha mantenido oculto el hecho.

Gabriel García Xochihua, delegado del Sindicato de Trabajadores Administrativos, Técnicos y Manuales del INAH, también hizo pública la existencia de una grieta, que ya se extendió 30 metros en la esquina norponiente de la Pirámide de los Nichos, la cual se produjo durante el espectáculo multimedia que hace cinco años fue montado por el francés Yves Pepin, y que de la misma forma se ocultada por el instituto.

Desde el año 2000, cuando iniciaron los festivales Cumbre Tajín en la administración del gobernador Miguel Alemán, y que se ha extendido hasta la actual gestión de Fidel Herrera Beltrán, custodios se encuentran en resistencia por el uso de la zona prehispánica con fines de lucro.

Ahora, con el intento de montar el espectáculo Resplandor teotihuacano, García Xochihua aseguró que los 34 custodios de El Tajín se han unido al repudio contra dicho acto.

En el caso de Veracruz, los custodios, que pertenecen a la etnia totonaca, revelaron que el INAH se convirtió en cómplice y alcahuete de los organizadores del festival Cumbre Tajín, a pesar de que su objetivo es velar por el cuidado del patrimonio cultural; lo mismo sucederá en Teotihuacán.

Ejemplo de lo anterior, dijo García Xochihua, es el hermetismo que el Consejo Nacional de Arqueológica y la dirección del Centro INAH-Veracruz han mantenido sobre los daños que ya se produjeron en el sitio arqueológico, y que se presume son por el montaje de la iluminación de las pirámides para los espectáculos Luces y Voces del Tajín y Tajín Vive.

Desde 2003, refirió el custodio Gabriel García, se reportó la aparición de una fractura en la esquina norponiente de la pirámide de Los Nichos, edificio principal y de mayor belleza del sitio arqueológico, aparentemente provocada por la vibración y los rayos láser utilizados en el espectáculo.

Se hizo el reporte y todo fue silencio, los (técnicos) franceses se fueron (al concluir el gobierno de Alemán Velasco) y así se dejó todo; ahora la grieta se extendió a 30 metros; prácticamente afecta ya toda la esquina del edificio, y existe verdadero peligro, ya que puede ocasionar un desplazamiento que derive en hundimiento o incluso en desprendimiento del templo.

Pero ahí no para el daño, ya que con el nuevo sistema de iluminación para el espectáculo denominado Tajín Vive, que se realiza desde 2005, ya se notan afectaciones en la zona arqueológica, indirectas y por la mano del hombre, dijo García Xochihua.

El custodio mostró la esquina del muro que rodea la plaza del Juego de Pelota 17-27, donde un bajorrelieve fue roto a golpes, presuntamente con un martillo o marro, el domingo 15 de marzo, cuando iniciaron los trabajos de colocación de la iluminación.

El delegado sindical dijo que pese a que se levantó un reporte, que está en poder del Consejo Nacional de Arqueología, el INAH mantiene hermetismo sobre el asunto, aparentemente para no suspender el espectáculo y los recorridos nocturnos. Por otro lado, acusó que se desconoce el paradero de los donativos que el gobierno de Veracruz ha entregado al INAH por el uso de El Tajín en los espectáculos multimedia, que han oscilado entre 2 y 3 millones de pesos por año.