Impedidas por su situación económica para tener una fiesta de 15 años, 330 adolescentes tomaron el Zócalo capitalino para la tercera celebración anual consecutiva de este tipo, para convertirnos en princesas urbanas, bailar el tradicional vals y a ritmo de hip hop, gritar que tienen derecho a la educación, a la cultura, a una vida digna, teniendo como padrino al jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard Casaubon, quien partió el pastel con ellas.

Desde muy temprano empezaron las actividades para las adolescentes que se reunieron en el Instituto de la Juventud capitalino, donde las peinaron,y de ahí, ya enfundadas en sus vestidos de 15 años, abordaron autobuses que las trasladaron al Ángel de la Independencia donde se tomaron la foto oficial, con la cual se rompió el récord de festejadas.

Acto seguido, cinco Turibuses llevaron a las jovencitas del Ángel al Zócalo, a donde arribaron cinco minutos antes de las seis de la tarde. El escenario colocado frente a la catedral metropolitana se convirtió en un espacio multicolor al dar cabida a las quinceañeras que lucían sonrientes, con sus vestidos de diversas tonalidades de azul, verde, rojo, amarillo, así como uno que otro color negro.

Y empezó el vals, todas bailaron los acordes de Strauss, y cada vez que terminaba una pieza soltaban decenas de globos rosas. Mientras danzaban, con la mirada y grandes sonrisas buscaban a sus familiares para mandarles saludos, al tiempo que éstos seguían cada movimiento de sus festejadas.

Ebrard presenció el espectáculo y en su oportunidad, entre gritos de ¡Marcelo, Marcelo!, destacó que todas las princesas de esta ciudad tienen derecho a tener su fiesta de 15 años, cobijadas por su bandera, en referencia al lábaro patrio que ondeaba en el asta bandera monumental y que a solicitud del gobierno capitalino no fue retirada a las seis de la tarde, como normalmente se hace.