Opinión
Ver día anteriorViernes 24 de abril de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Penultimátum

Salud, vida y familia

C

omienza el jueves próximo en Mérida. Lo patrocina la arquidiócesis de Yucatán, pero cuenta con un apoyo no menos importante en cuanto a recursos contantes y sonantes, infraestructura y presencia oficial: el del gobierno de Yucatán. Nos referimos al segundo Congreso de Salud, Vida y Familia. Su lema: El amor de la familia, sana y da vida. Se refiere, como es obvio, a la única reconocida por la Iglesia y, cosas de los tiempos actuales, por los gobiernos presididos por panistas, que en la práctica borran el principio de que México es un Estado laico, no una provincia religiosa del Vaticano. Como corresponde a los tiempos actuales, el encuentro contará con la presencia destacada de la gobernadora de Yucatán, militante del Partido Revolucionario Institucional, que presume defender el principio constitucional de la separación de las iglesias y el Estado. Pero ahora cuenta más la obtención de votos y que no le lancen campañas negativas en las parroquias.

No es el contubernio Iglesia-Estado lo que nos interesa destacar de la reunión de Mérida, y en la que se condenará el aborto, el uso del condón, las uniones entre personas del mismo sexo, la eutanasia. Sí, en cambio, la discriminación contra quien, por derecho propio, merece estar en ese congreso. Nos referimos a Víctor Lorenzo Patrón Huit, quien a principios de marzo estuvo brevemente detenido en Yucalpetén, acusado por María del Rosario Díaz de haberse negado desde 2003 a darle dinero para mantener a los dos hijos procreados con él. El acusado negó tal cosa y dijo ser un padre cumplidor.

Y para probarlo, declararon en su favor Zoraida Isela Escobedo, María Cristina Ortiz y Josefina Aguayo Yam. Con las tres tiene hijos. Las tres manifestaron ante la autoridad que Víctor Lorenzo, de 41 años, de profesión músico y serigrafista, es una buena persona, mantiene a sus hijos y es muy cariñoso con todos ellos. Hizo bien el juez en liberarlo, pues necesita trabajar en tiempo de crisis para sostener a los ocho hijos que tiene con sus cuatro familias (él pertenece a la Unión Nacional de Padres de Cuatro o más familias).

El presbítero Onésimo Balam, encargado del templo de la Sagrada Familia, declaró a esta columna que no fue por asuntos morales que no se invitó a don Víctor para que platicara sobre las ventajas y desventajas de tener más de una familia. La realidad es que son tantos los casos de jefes de familias múltiples que, junto con sus hijos y compañeras, no cabrían en el Centro de Convenciones Siglo XXI, de Mérida.

Mientras, el edil de Cancún, Greg Sánchez, del PRD, sentenció que la inseguridad y violencia que padece esa ciudad turística no es un problema de la policía ni del gobierno, es la irresponsabilidad de los padres, que no han sabido educar a sus hijos. La crisis no es económica, es de valores, remató.