El secretario del Trabajo, Javier Lozano, no tiene por qué apelar a la buena voluntad o sensibilidad de los patrones por la emergencia sanitaria, sino hacerlos cumplir la ley y obligarlos a no aplicar descuentos a los trabajadores, ni hacerles pagar por los días no laborados, esto es ilegal, además las empresas recibirán apoyos fiscales y aún quieren cargar la contingencia a los trabajadores.

Representantes del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal) y del Centro Pro de Derechos Humanos, advirtieron lo anterior, al dar a conocer la versión 12 del Informe de violaciones a los derechos laborales en México, el cual advierte que hay grave impunidad patronal en el país, un capitalismo de compadres; se pisotea la Ley Federal del Trabajo y el gobierno da todas las facilidades a las grandes consorcios, mientras emprende una persecución de los trabajadores que exigen sus derechos, trátese de los gremios de electricistas, mineros y maestros o bien, empleados de Wal Mart o de la Asociación Nacional de Actores.

El informe detalla que el deterioro de la economía de los mexicanos no llegó con la crisis mundial, sólo se agravó y se acrecentará más con la emergencia sanitaria del país, por lo que se prevé un aumento de la pobreza y mayor polarización en la distribución del ingreso, estimó Luis Arriaga, director del Centro Pro de Derechos Humanos, mientras Rodrigo Olvera, del Cereal, dijo que en la revisión de la situación laboral en el país durante 2008 y parte de 2009, la constante es la represión y violación de los derechos laborales en México.

Conducta federal permisiva

Olvera planteó que la conducta permisiva del gobierno ha vuelto normal las violaciones a los trabajadores como en las maquiladoras fronterizas. También ha devenido en la utilización de esquemas de contratación sin derechos, como en múltiples sectores, entre ellos el de los medios de comunicación.

Sostuvo que la política laboral del régimen ha apoyado a representaciones antidemocráticas por encima de la base trabajadora como en el caso de los sindicatos de maestros y de electricistas. Y ha permitido total ausencia de garantías de seguridad social como en caso de la Asociación Nacional de Actores, además de que acepta que se perpetren más violaciones, como encadenar el salario a la compra de productos del mismo patrón, como en Wal Mart.

Todo un apartado del informe se refiere al caso minero, en el que enfatiza que el gobierno ha mantenido una feroz represión contra el gremio, lo que evidencia el acoso a los trabajadores que luchan por su autodeterminación y derechos.