Los estadios abrirán sus puertas al público, pero sólo en 50 por ciento de su capacidad para los partidos de este fin de semana, anunció la Federación Mexicana de Futbol (FMF), como parte de una serie de medidas por la contingencia sanitaria a causa de la influenza.

Después de que en la jornada 16 se realizaron los juegos a puertas cerradas, el secretario general de la FMF, Decio de María, informó que ya se avisó a todos los clubes que serán locales para que pongan en marcha las medidas necesarias, a fin de que los aficionados pueden regresar a los estadios y se tenga un buen control sobre sus porras o grupos de animación.

A partir de hoy se ha realizado una limpieza profunda en todos los inmuebles, lo cual incluyó todas las áreas. Las personas se ubicarán en un asiento si y en otro no, se intercalarán filas y sólo en caso de que asista una familia sus integrantes se podrán sentar juntos, dijo, y pidió que el público llegue con tiempo suficiente para que en forma ordenada pueda ingresar y acomodarse.

Antes de entrar al estadio habrá gel desinfectante para las manos y se sugiere que las personas asistan con cubrebocas, mientras en la zona de torniquetes habrá personas con un cuestionario para preguntar a los asistentes si tienen temperatura o si se sienten enfermos.

Por el momento, aclaró De María, no se dispone de pistolas termográficas para medir la temperatura a las personas, y añadió que en los inmuebles con pantalla se transmitirán las recomendaciones sanitarias para evitar contagiarse y en los que no haya estos aparatos se repartirán folletos con información al respecto.

Estas medidas, dijo, también están previstas para la final de la Liga de Campeones de Concacaf, a realizarse el próximo martes en Cancún entre Atlante y Cruz Azul.

Conforme vaya evolucionando la alerta se determinarán las acciones para la liguilla, precisó.

Por otra parte, la FMF espera la decisión de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) con respecto a la hora, día y sede de los encuentros de San Luis y Chivas en la Copa Libertadores.

Estamos en espera de una decisión de la Conmebol, no de proponer y dar. La autoridad que regula el torneo tiene que hacerlo oficial, dijo, y precisó que los partidos de ida serán el 13 de mayo y los de regreso el 20.

Al respecto, la Conmebol dijo que los encuentros se realizarán en territorio mexicano si los clubes sudamericanos lo aceptan. Los partidos podrán realizarse sin ninguna contingencia el 13 de mayo en los respectivos estadios de los Gladiadores y Guadalajara, informó en un comunicado.

La Conmebol dio de plazo hasta hoy al mediodía para que los clubes Nacional de Uruguay y Sao Paulo de Brasil respondan si aceptan jugar en México; de no aceptar se optará por otra alternativa.

Ambos equipos sudamericanos consultan la medida con su gobierno para tomar una determinación. No es una decisión fácil, hay que analizar una gran cantidad de cosas, dijo el presidente del club uruguayo, Ricardo Alarcón.

En Brasil criticaron la indefinición de la Conmebol y reiteraron su temor de viajar. Si se confirma el partido en México la situación se complica mucho, pues Sao Paulo se quedará en una posición muy frágil: si decimos que no vamos, estaremos siendo poco gentiles con México y su pueblo, y si decimos que está todo bien, podremos exponer a nuestro grupo de jugadores a un gran riesgo, señaló el directivo Marco Aurelio Cunha.