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Por la contingencia sanitaria se perderán 200 mil plazas, señalan

Replantear apoyos, o habrá más desempleo, dicen obreros y patrones
 
Periódico La Jornada
Viernes 8 de mayo de 2009, p. 10

Sin acuerdos concluyó la reunión con los sectores productivos a la que convocó el titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Javier Lozano, informaron representantes de los sectores obrero y empresarial.

Manifestaron que el programa que anunció el presidente Felipe Calderón para apoyar a las empresas afectadas por la contingencia sanitaria es insuficiente y pidieron replantear los apoyos financieros, o quedarán sin trabajo más de 200 mil personas.

Este número de nuevos desocupados será adicional a los 300 mil o 400 mil trabajadores que perderán su empleo este año por la crisis, dijo el dirigente de la Federación Nacional de Sindicatos Bancarios, Enrique Aguilar Borrego.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Armando Paredes, indicó que plantearon a Lozano que deben instrumentarse medidas adicionales para ayudar a las empresas, porque viene una afectación grande en el empleo.

A la reunión asistieron el subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, José Antonio Meade, y el encargado de la Unidad de Planeación Económica de la dependencia, Miguel Messmacher, a quienes los representantes obreros y empresariales pidieron que canalicen con prontitud los incentivos y apoyos económicos anunciados, porque se tardan años en otorgarlos, cuando las empresas ya fenecieron.

Durante el diálogo se detalló que los sectores más afectados por la contingencia sanitaria son turismo, manufacturero y automotriz, así como el restaurantero, y se pidió a Lozano que se establezca un plan de incentivos más fuertes con la finalidad de que no haya una cascada de desempleo, informó Aguilar Borrego.

Apuntó que no hubo ningún acuerdo todavía, pero vamos a seguir empujando para que se sigan dando incentivos para que no se pierdan los empleos, pues la situación va a ser difícil si se cae el empleo, como se piensa, porque una caída en el PIB significa desemplear al menos otros 200 mil trabajadores.

El presidente del CCE comentó que se prevé un PIB negativo de entre 4.5 y 5 por ciento; dijo que aún no se cuantifica el costo de la contingencia, pero su afectación en la economía será fuerte. Indicó que las medidas que se han planteado en algunos temas son insuficientes; estamos valorándolas y viendo que otras se van a tener que instrumentar. Se debe hacer un recuento de los programas anticíclicos y replantearlos; incluso Nafinsa va a tener que poner en marcha un programa para las empresas con problemas de liquidez, señaló.

Por la mañana, en la reunión semanal de la Unión Nacional de Trabajadores, Francisco Hernández Juárez apuntó que el apoyo anunciado para el sector productivo afectado por la emergencia sanitaria “es una ayuda pequeña, desde luego insuficiente, pero me conformaría con que fuera cierta, porque así nos pasó con el famoso paquete de apoyo a las empresas que entraron en paros técnicos, que supuestamente iban a ayudar a los trabajadores y todavía los estamos esperando.

“El caso más relevante es el de Volkswagen –agregó–, que ya casi acaba con sus paros y no les llega la famosa ayuda.”