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Crimen y crisis restarán votos a PAN y PRI, prevé candidato perredista por San Luis Potosí

Juan Ramiro Robledo apuesta a la decepción
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Juan Ramiro Robledo Ruiz, candidato a la gubernatura postulado por la Alianza por el Bien de San Luis, integrada por PRD, PT, Convergencia y Conciencia Popular, asegura que la izquierda mexicana ahora busca hacer cambios revolucionarios por la via electoralFoto Edith Argüelles
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 1º de junio de 2009, p. 36

San Luis Potosí, SLP, 31 de mayo. Aunque el Partido Acción Nacional (PAN) trae mucho aparato y llena las calles de pendones, el aumento de la inseguridad y las ejecuciones del crimen organizado reducirán su fuerza electoral; mientras, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) correrá la misma suerte porque abandonó su compromiso con las causas populares, y sus líderes y gobernantes no sólo se unieron a la derecha, sino que defienden el neoliberalismo.

El ex priísta Juan Ramiro Robledo Ruiz, candidato a la gubernatura por la alianza Por el Bien de San Luis –donde confluyen los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Conciencia Popular– señaló lo anterior y reconoció que PAN y PRI lo aventajan en recursos, pero confió en ganarles con propuestas de mayor calidad y claridad, y porque las crisis económica y de inseguridad multiplicarán el voto contra ambos.

Otra oportunidad, dijo, radica en que el gobernador panista Marcelo de los Santos no redujo la pobreza, pues sólo aplicó programitas casi de limosnas, lo que mantiene el riesgo de un conflicto social.

Aunado a ello, el candidato del PAN-Nueva Alianza, Alejandro Zapata Perogordo, no puede ser el gobernador del empleo cuando el presidente Felipe Calderón fracasó en la misma promesa, máxime en un contexto de carestía, salarios de hambre, despidos y recesión mundial; además, sostuvo, el panista tiene una visión de modernidad que corresponde a la clase pudiente, mientras el grueso de la población sigue pobre y marginada.

Sobre Fernando Toranzo Fernández, quien fue secretario de Salud del actual gobierno y es candidato de la alianza PRI-Partido Verde-Partido Social Demócrata, dijo que no puede criticarlo porque no ha propuesto nada, y aunque afirma ser honrado, y lo creemos, convalidó cinco años y medio la política de un gobierno signado por la corrupción, defensor del criterio empresarial, que gastó en lo que no se necesita. Por lo tanto, es cómplice.

Originario de la capital potosina, Robledo estudió leyes al principio de la década de 1970 y fue secretario de la Universidad Autónoma de San Luis (1986-1988). Su padre fue diputado federal por el PRI, partido con el que Robledo simpatizó desde 1970 y al que se afilió cinco años después.

Ha sido secretario general de Gobierno estatal (1988-1991), diputado federal y senador, pero abandonó la militancia priísta en 2003, cuando quiso ser candidato a gobernador pero no resultó favorecido en la selección interna. Ya como político independiente, y sin afiliarse, fue diputado local del PRD en 2003.

Sobre la lucha interna que perdió hace seis años dijo: Hubo una intromisión desaseada y grosera de Fernando Silva Nieto, entonces gobernador priísta, y de Horacio Sánchez Unzueta, su antecesor, que rompieron las reglas e impusieron a Luis García Julián, como a Toranzo ahora. La idea en ambos casos era manipularlos, pero el primero se les rebeló y del segundo espero que no se deje.

Robledo Ruiz representa cuatro fuerzas de izquierda –una de ellas estatal– y dice ser el único abanderado que apoyan PRD, PT y Convergencia, partidos del Frente Amplio Progresista (FAP) divididos en el ámbito federal. También pactó con sindicatos y líderes de otras agrupaciones, incluidos núcleos de AN y PRI decepcionados de sus dirigentes.

Sus 33 propuestas de campaña hacen énfasis en reducir la pobreza y la desigualdad. Plantea instituir el Estado de bienestar en la Constitución estatal, elevar las participaciones federales y fortalecer los municipios. Pretende atraer el voto joven con la promesa de invertir 400 millones de pesos en más universidades y otorgar becas a los estudiantes de educación superior, como hace el Gobierno del Distrito Federal.

Si no gana la elección, asegura, continuará en la izquierda para transformar pacíficamente al país y continuar su carrera política.