Opinión
Ver día anteriorMartes 2 de junio de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
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México SA

Signos alentadores sólo vistos por Calderón

Camioneros toman la iniciativa

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Ayer el mayor fabricante de autos de Estados Unidos anunció que se acogió a la protección contra la bancarrota, con un pasivo de 172 mil 800 millones de dólares y activos por 82 mil 300 millones. La operación pone a la compañía bajo el control del Estado, que se convertirá en el mayor accionista de GM y acelerará su restructuración. El presidente Barack Obama aseguró que el concurso de acreedores es vital para que la empresa pueda volver a levantarse y vinculó la recuperación económica del país a la de la compañía: Como va General Motors, así va Estados Unidos, señaló. Afirmó que GM es una empresa estadunidense, y como tal, la responsabilidad sobre su futuro corresponde al gobierno, pero aclaró que éste será un accionista más en la compañía y que su intención es salir del capital cuanto antes. En la imagen, cartel frente a la planta de GM de Lansing, Michigan, que está cerradaFoto Reuters
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asan los meses y el agujerado navío de gran calado –que según Calderón es la economía mexicana– se mantiene a pique, mientras sólo los visionarios de Los Pinos registran signos alentadores y resultados positivos de la autodenominada política anti cíclica anunciada desde octubre pasado. De forma paralela, emergen todo tipo de dudas –por llamarlas de alguna forma– sobre el destino real de los recursos públicos involucrados en los programas de rescate y apoyo anunciados por el gobierno calderonista desde entonces: ¿realmente se han canalizado a la reactivación de la alicaída economía nacional o, como todo apunta, al pago de la deuda privada y a sacar a flote las finanzas de las grandes empresas?

De un descenso de 1.6 por ciento en el último trimestre de 2008, la economía mexicana pasó a un desplome de 8.2 por ciento en el primero de 2009, y la mayoría coincide en que los resultados del periodo abril-junio del presente año serán aún peores. Por ejemplo, la más reciente encuesta (mayo) que mensualmente levanta el Banco de México entre los especialistas en economía del sector privado aporta el siguiente elemento: para el segundo trimestre de este agitadísimo año, adelantan un derrumbe del PIB no menor a 8.6 por ciento (es decir, la misma dosis de enero-marzo, más su pilón) y estiman un hundimiento anual de 5.8 por ciento, proporción casi dos puntos porcentuales mayor a la del mes previo.

Entre los costos más graves de una expectativa como la prevista por los encuestados destaca el que cubre el sector laboral, toda vez que la cancelación de empleo formal será significativa en abril-junio, o lo que es lo mismo, mayor a la registrada en el primer trimestre de 2009. “Se espera –precisan– que el número de trabajadores asegurados en el IMSS se reduzca al cierre del año (de diciembre de 2008 a diciembre de 2009) en 592 mil personas” (100 mil más que los estimados en la encuesta de abril), que se sumarían a los más de 400 mil puestos de trabajo en el sector formal perdidos en el último bimestre de 2008.

En números cerrados, un millón de mexicanos expulsados del sector formal en 14 meses, sin considerar a la población económicamente activa que por primera vez intentó ser considerada en el mercado laboral. A lo anterior, los especialistas agregan: prácticamente la totalidad de los encuestados estimó que, en el primer semestre de 2009 los salarios reales disminuirán con relación a sus niveles en el segundo semestre de 2008. Por otra parte, 62 por ciento de los especialistas indicó que en el segundo semestre de 2009 los salarios reales caerán con respecto a sus niveles en el primer semestre de este año. Como se observa, signos alentadores (Calderón dixit) por todas partes.

Si de dudas se trata, allí está el intercambio entre la Secretaría de Hacienda y quienes denuncian subejercicio presupuestal en tiempos de crisis. La dependencia a cargo del doctor catarrito recientemente aseguró que el esfuerzo del gobierno federal para ejercer el presupuesto de manera contra cíclica se hace evidente al comparar lo que efectivamente se ejerció en los primeros tres meses de 2009 con lo ejercido en el mismo periodo de años pasados; la estrategia contra cíclica, y el ritmo de gasto que se ha observado en las dependencias del gobierno federal, particularmente en las que destinan un monto importante para inversión, han contribuido a mitigar el efecto de la crisis económica internacional en México.

Eso dice, pero la Cámara de Diputados sostiene lo contrario. Por medio de su Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, revira: la SHCP informa sobre los subejercicios conforme a lo dispuesto en el artículo 23, octavo y noveno párrafos, de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, de las adecuaciones presupuestarias autorizadas de las dependencias de la Administración Pública Centralizada, por lo que para el cálculo de los subejercicios utiliza las adecuaciones al mes de marzo y no el calendario original. (Así) al primer trimestre del ejercicio fiscal 2009, la administración pública centralizada reportó un subejercicio de 7 mil 543.2 millones de pesos, lo cual representa 4 por ciento del presupuesto programado.

Las dependencias con mayores subejercicios en términos monetarios son las secretarías de Comunicaciones y Transportes, Medio Ambiente y Recursos Naturales, Hacienda y Crédito Público, Desarrollo Social, Turismo, Economía y Reforma Agraria, así como el Conacyt y la PGR. De las 24 dependencias de la administración central, cinco no presentaron subejercicios: Presidencia de la República, Defensa Nacional, Marina, Seguridad Pública y la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal. Si bien la Secretaría de Educación Pública presentó un sobreejercicio de 105.2 millones de pesos, éste se contabilizó como subejercicio nulo.

Las dependencias del Ejecutivo federal que presentaron subejercicios en el primer trimestre del año, así como el tipo de gasto y las principales unidades responsables que los ocasionaron, de acuerdo con el citado Centro de Estudios, son: la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, con 3 mil 329.3 millones de pesos, el cual constituye el 44.1 por ciento de subejercicio total de la administración; éste se concentra en 78.6 por ciento en el renglón de gasto de capital y 94.9 por ciento se generó en el sector central; Medio Ambiente y Recursos Naturales, 947.2 millones, que representan 12.6 por ciento del total no ejercido, el cual se generó en 81.7 por ciento en la Comisión Nacional del Agua, y en 47.3 por ciento en el rubro de gasto corriente; Hacienda y Crédito Público ejerció 91.6 por ciento de su presupuesto programado para el trimestre comentado, esto se debió a los subejercicios en las unidades responsables de Servicio de Administración Tributaria (31.7 por ciento), Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (21.1), Instituto Nacional de las Mujeres (19) y el resto de las unidades contribuyeron con 28.2 por ciento.

Las rebanadas del pastel

Cocinado el pastel, ayer se presentó en sociedad la nueva General Motors, y con ella el flamante accionista mayoritario, el gobierno estadunidense, de quienes ahora dependen los trabajadores mexicanos. ¿Y dónde está el gobierno calderonista?, lo mismo que desde hace 15 años se preguntan los empresarios del autotransporte de este lado, quienes de plano tomaron la iniciativa: demandarán al gobierno de Estados Unidos por 6 mil millones de dólares, ante la negativa de Washington de permitir el tráfico de sus vehículos hacia ese país, como estipula el TLCAN.