El gobierno del estado de México, que encabeza Enrique Peña Nieto, continúa trabajando en el proyecto Resplandor teotihuacano, según confirmó a La Jornada Roberto Calleja, vocero del mandatario.

Dichos trabajos fueron suspendidos en marzo pasado por siete expertos propuestos por el Instituto Nacional Antropología e Historia (INAH) a consecuencia de las protestas y los daños documentados en esa zona arqueológica.

El Grupo Técnico Evaluador (GTE) ordenó hace tres meses modificar el planteamiento original y fijó un plazo que vencerá en septiembre. Ante esto, Calleja respondió que los plazos son relativos y que el nuevo diseño podría darse a conocer antes o después de lo que determinó el GTE.

Estas declaraciones fueron vertidas luego que Alejandro Fernández Campillo, titular de la Comisión para el Desarrollo Turístico del Valle de Teotihuacán, rechazó ofrecer detalles de las modificaciones que se realizarán para que la propuesta sea aceptada.

En tanto, el Instituto de Acceso a la Información del Estado de México (Infoem) dio a conocer las primeras cifras oficiales mediante las cuales se confirma que hasta diciembre pasado se han pagado 49 millones 800 mil pesos a las empresas Philips y Mario Alberto Gómez SA de CV, según consta en los contratos de adquisiciones de los cuales tiene copia La Jornada.

Los documentos indican que esa comisión (organismo descentralizado de carácter estatal) pagaría un total de 66 millones 745 mil 269 a esas empresas.

Opacidad

A la compañía Philips México le sería cubierta la cantidad de 49 millones 851 mil 769 pesos, según el desglose estipulado de la siguiente manera: en la última semana de septiembre de 2008 se dio un anticipo de 21 millones 800 mil pesos; en la primera quincena de diciembre se entregaron 13 millones más y para la última semana de febrero de 2009 se debieron pagar 15 millones 51 mil 769 pesos.

Los pagos serían por concepto de 3 mil 456 luces led importadas de Francia. Además, Philips proporcionaría sin costo el diseño de iluminación y los proyectos ejecutivos para su implementación en el sitio prehispánico.

De los recursos financieros para finiquitar el pago a Philips, el pasado febrero, no se sabe si fueron entregados, pues en esa fecha el debate en torno a la suspensión del proyecto multimedia se había agudizado por los daños causados al patrimonio arqueológico, según consignaron líderes sindicales del INAH.

En el contrato, la compañía Philips garantizó los bienes adquiridos contra defectos de tecnología, materiales y mano de obra durante un periodo de 12 meses y se comprometió a efectuar todas las reparaciones y/o sustituirlos en caso de defectos por otros bienes nuevos de iguales características.

En otra de las cláusulas, Philips se obligó a responder por su cuenta y riesgo de los defectos, daños y perjuicios que por inobservancia de las normas o negligencia de su parte causen a quien paga o a terceros.

Además se comprometió en todo momento a dar adiestramiento técnico necesario a todas las personas quienes serán las responsables del manejo, instalación, colocación y mantenimiento de los productos que serán utilizados en la implementación de los sistemas de iluminación.

El documento consigna que la Comisión para el Desarrollo Turístico del Valle de Teotihuacán no adquirió ninguna obligación de carácter laboral con Philips ni con los trabajadores que contrate, y la compañía la exime de cualquier responsabilidad de carácter civil, penal, fiscal, de seguridad social u otra que llegara a generarse.

Philips será responsable solidario por la negligencia, impericia o dolo en que incurran los trabajadores a su servicio.

Este contrato fue firmado en Teotihuacán, estado de México, el 30 de septiembre de 2008 por la comisión que encabeza Fernández Campillo, y Paulo Fernando Simas Peixoto, presidente y director general de Philips, así como Federico Chávez Pimentel, director de iluminación de la compañía.

En cuanto a la instalación física, la comisión firmó un contrato con la empresa Mario Alberto Gómez SA de CV para la colocación de no más de 3 mil 500 luminarias de tipo led que operarán con plantas de luz.

También se estipuló el montaje físico de las luminarias en el sitio, canalización necesaria tanto oculta como visible, cableado eléctrico e instalación de equipo de control de acuerdo con las especificaciones acordadas por la comisión y el INAH.

El total del precio cobrado por esa compañía asciende a 16 millones 893 mil 500 pesos, distribuidos de la siguiente forma: el 30 de septiembre de 2008 fueron entregados 15 millones de pesos y para el 27 de febrero de este año se pagarían un millón 893 mil 500 pesos.

El total de esa cantidad estaba destinado a la entrega de la instalación eléctrica el 1º de enero de 2009, cuando ya arreciaba la polémica por las perforaciones en las pirámides.

Esta compañía se obligó a responder de los defectos o vicios ocultos en un periodo de 12 meses a partir de la inauguración de los bienes materia de ese contrato y de cualquier otra responsabilidad en que hubiera incurrido.

Los contratos y el proyecto multimedia se inscriben en el convenio marco de colaboración y coordinación suscrito por el INAH y el gobierno del estado de México en octubre de 2007.