El presidente del Senado, Gustavo Madero, manifestó que la renuncia de Germán Martínez a la presidencia de Acción Nacional es el primer paso para que el partido se autocritique y busque enmendar sus errores con la ciudadanía. Hubo yerros en la campaña electoral, acusó, entre ellos centrarla en el tema de la seguridad, cuando a la población le importaba más lo económico.

A su vez, el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Fernando Castro Trenti destacó que la renuncia de Germán Martínez “es la crónica de un suceso anunciado.

Él y el presidente Felipe Calderón se embarcaron en una ruta sin regreso, quebrantaron los principios democráticos de su partido al imponer a más de 180 candidatos, tomaron la decisión de hacerse del partido, vulneraron la unidad, impusieron candidaturas y desoyeron a la militancia sobre presuntos vínculos de candidatos con la delincuencia organizada.

Agregó que Calderón y Martínez decidieron seguir a pie juntillas las orientaciones de un extranjero. La ciudadanía los castigó porque explotaron en exceso las acciones del gobierno, como si éstas hubieran dado resultados. Advirtió que Calderón tiene que renovar el gabinete, particularmente el económico y el laboral.

En el mismo sentido, Emilio Gamboa, coordinador de los diputados priístas, dijo que si Calderón quiere negociar debe hacer una evaluación interna de cómo le funcionaron sus secretarios de Estado y corregir el rumbo.

A su vez, el presidente de la mesa directiva de San Lázaro, el priísta César Duarte, subrayó: la limpia del gabinete debe darse para que puedan fluir los recursos (económicos) que ellos (los secretarios) han detenido, y criticó esa obsesión por los subejercicios y la pesadez de la burocracia.

A su vez, organismos cúpula del sector privado, como el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), destacaron que el fracaso electoral del PAN se debió a los efectos de la crisis económica, que ha provocado el cierre de 12 mil empresas en los últimos siete meses y desempleo de 2.5 millones de personas.

Para el titular del CCE, Armando Paredes Arroyo-Loza, la crisis económica es uno de los factores que orillaron al electorado a dejar de apoyar al PAN.

A su vez, el presidente de la Coparmex, Ricardo González Sada, externó: somos testigos del desencanto y el malestar que existe por la falta de soluciones, la impunidad y la nula rendición de cuentas de quienes se ostentan como representantes populares.

En tanto, la Conferencia del Episcopado Mexicano y la arquidiócesis de México manifestaron que el declive panista no es una reprobación de la ciudadanía al gobierno de Calderón, sino al sistema político mexicano.

Finalmente, el Sindicato Mexicano de Electricistas consideró que el descontento social provocado por el desempleo y la crisis económica provocó el voto de castigo contra el blanquiazul, fundamentalmente por el incumplimiento de las promesas del gobierno.