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Concierto de Juanes en La Habana desencadena diversas interpretaciones sobre la paz

Daremos al mundo una lección de tolerancia, señaló Olga Tañón

Relaciones Exteriores de Cuba percibe el recital de mañana como rechazo a la hostilidad de EU contra la nación

La tv isleña replicó a críticas lanzadas contra Paz sin fronteras desde Miami

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La salsera Olga Tañón parafraseó a Juan Pablo II cuando éste visitó la isla en 1998: Cuba se está abriendo al mundo y el mundo se está abriendo a Cuba. En la imagen, en su arribo al hotel Nacional, en La HabanaFoto Reuters
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 19 de septiembre de 2009, p. 8

La Habana, 18 de septiembre. Aunque la convocatoria al concierto que encabezará Juanes en la Plaza de la Revolución descarta mensajes políticos de cualquier índole, la polémica previa se ha vuelto imparable y está provocando las más diversas interpretaciones sobre la paz que se invocará este domingo.

La televisión cubana se sumó a la controversia el jueves, replicando las críticas que se han lanzado desde Miami contra el espectáculo. Un programa en horario estelar mostró imágenes de anticastristas destruyendo discos de Juanes a martillazos y reprodujo alegatos que en esencia acusan al rockero de favorecer al gobierno cubano con su segundo Paz sin fronteras.

¿Juanes es comunista y por eso va a cantarle a los comunistas?, preguntaba una mujer fuera de sí.

No había que hacer ningún comentario a esas secuencias para mostrar el contraste de aquella exaltación con el interés de la población cubana por el festín musical que se avecina.

El viceministro de Cultura, Abel Acosta, dijo en la emisión especial que advirtió al cantante colombiano de posibles represalias y le reconoció su gesto valiente de continuar con el proyecto a pesar de la ofensiva.

Reflejo de la opinión pública

El miércoles, el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, interpretó el espectáculo como rechazo a la hostilidad de Estados Unidos contra Cuba. Yo creo, dijo el canciller, que es un reflejo de la opinión pública internacional, que se pronuncia por un cambio en la relación entre los dos países.

Es una manifestación en favor de la paz. El bloqueo es un acto de guerra económica. Entiendo que los artistas que van a cantar a la paz aquí, en ningún caso entenderían que esta política absurda del bloqueo continúe. Pero corresponderá a ellos opinar.

Con óptica similar, el cantautor Silvio Rodríguez dijo en un especial de televisión que respaldó el plan porque “querer cantar a la paz en lugares en el mundo donde hay conflictos también revela una vocación de actuar, de no quedarse de brazos cruzados.

Juanes plantea que Cuba no puede vivir en paz, agregó Rodríguez. Yo estoy de acuerdo con él. Es verdad que nosotros, por haber escogido una forma personal de vivir, un tipo de gobierno, un tipo de sociedad, hemos sido bloqueados y perseguidos.

La puertorriqueña Olga Tañón llegó a La Habana el jueves, y en el hotel Nacional dijo que no vino a Cuba a hablar de política. Aquí todo el mundo tiene formas de pensar diferentes y yo no tengo ningún problema. Yo vengo a cantar. Estamos aquí para dar al mundo una lección de tolerancia.

Pero luego opinó, parafrasesando la invocación que hizo durante su visita a la isla en 1998 el papa Juan Pablo II, que con este show Cuba se está abriendo al mundo y el mundo se está abriendo a Cuba.

En una vertiente interna de la polémica, más de 30 opositores presos firmaron una declaración de apoyo al concierto, pidiendo que sea una ocasión de confraternidad entre todos los cubanos. Otro activista disidente, Oswaldo Payá, dijo que Juanes y Miguel Bosé deberían levantar la voz por la liberación de todos los prisioneros de conciencia cubanos.

Aunque estas opiniones no suelen difundirse en Cuba, el viceministro Acosta respondió tácitamente en la televisión. Dijo que estos mercenarios, poquísimos por cierto, buscan boicotear el concierto y ganar notoriedad, y apuntó que los opositores tienen una conexión muy clara con el núcleo fascista de Miami.